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miércoles 14 de septiembre de 2022
Una oportunidad para el transporte en Uruguay: El hidrógeno verde es más competitivo que el diésel
Siendo una tecnología que genera expectativa en Latinoamérica, los países cada vez se inclinan más hacia esta tecnología en relación al transporte. Aquí las claves para acelerar su expansión.
Óscar Ferreño, CEO de Ventus.
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Con el hidrógeno verde como un energético «promesa» para la descarbonización del transporte, Óscar Ferreño, Director de Relaciones Institucionales & Regulación de Ventus, opina sobre las posibilidades que posee Uruguay para avanzar por este camino. 

“Las energías renovables son muy competitivas en precio. Aunque es más barato, es menos gestionable”, afirma el empresario. 

En ese sentido, explica que el hidrógeno impulsado por energía eólica o solar tiene un precio de alrededor de USD 5 el kg, lo cual lo hace más competitivo que el diésel.

El problema surge cuando se analiza la infraestructura de cada energía. Es más costoso el transporte para esta energía limpia que para los hidrocarburos, indica.

No termina de ser competitivo porque no se consigue un camión al precio de uno de diésel. Falta que la investigación y el desarrollo diluyan sus costos en una fabricación masiva de vehículos”, amplía Ferreño. 

Según precisó, “si el hidrógeno pasa a ser una materia prima para amoníaco o metanol, será factible deshacerse de los hidrocarburos”.

Si se trata de plazos, el Director de Relaciones Institucionales & Regulación calcula que dentro de 15 o 20 años será posible visualizar estos cambios. 

Repensar el sistema en su totalidad

Ferreño hace hincapié en la necesidad de integrar el sistema de energía. Explica que “es 10% más barato transportar 1 MB/h energético en forma de molécula de gas por un gasoducto que en una línea de alta tensión”.

El almacenamiento del hidrógeno resulta más sencillo en metanol, líquido o amoníaco que en baterías. En ese sentido insta a que las líneas de transmisión sean complementarias a los grandes gasoductos para integrar el sistema. 

“No nos damos cuenta, pero vamos a ver en pocos años una revolución de los sistemas energéticos. Para ello hay que tomar consciencia de que la política de emisiones es inadmisible”, argumenta Ferreño.

¿Qué sucede con el H2 en la región?

En Uruguay se ha llevado adelante la creación de un Fondo Sectorial de Hidrógeno Verde, con el objetivo de respaldar económicamente proyectos de investigación, innovación y formación de hidrógeno verde.

Se trata de una iniciativa estatal para brindar financiamiento y apoyo a la construcción, producción y uso de Hidrógeno Verde y sus derivados, como podría ser a través del transporte de carga pesada o buses. 

En Colombia, el Gobierno ha reconocido la necesidad de avanzar en el desarrollo del H2 y ha promovido una normativa que respalde esta iniciativa. 

“El hidrógeno tiene un potencial importante, si se logra el desarrollo tecnológico que se necesita, dará una salida al transporte de carga pesada y larga distancia”, mencionó la exministra de Transporte, Ángela Orozco.

Por otro lado, Chile, con respaldo estatal y la iniciativa de Hyundai, verá su primer camión a hidrógeno entre finales de este año y el primer trimestre del 2023. 

También se avanzó en el transporte público con investigación. En el marco del Acuerdo Público Privado de Electromovilidad 2021, impulsado por el Ministerio de Energía, la Unidad de Tecnologías del Hidrógeno de la Pontificia Universidad Católica elaboró un estudio sobre la aplicación de hidrógeno como combustible en el transporte público. 

A partir de este, se determinó la factibilidad técnica de la utilización de esta tecnología para determinadas líneas de transporte en este país. 

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