Daniel Mandel, Business Development Manager de Biapower, explicó que hay varios aspectos por los que el coche eléctrico supera al de motor tradicional como los costes operativos y de mantenimiento. Entonces, una recarga bien gestionada podría ser un motivo más para que los consumidores opten por uno de ellos.

Así, afirmó que una flota de vehículos eléctricos puede competir y ser más económica que una de combustión interna y que en el mediano plazo estos estarían encaminador en superarlos.

“Una recarga mal gestionada, además de ser más costosa, puede incentivar al consumo de energía no renovables, por lo que hay que evaluar costes y beneficios ambientales”, manifestó Mandel.

A esto se dedica Biapower, cuyo software y plataforma de optimización del proceso de recarga de vehículos eléctricos fue finalista de los MUBIL Mobility Awards.

El objetivo de este producto, capaz de utilizarse en cargadores inteligentes, es que el suministro de energía sea “más eficiente, más económico, y más sostenible”, según recitó Mandel.

Para su uso, el usuario ni siquiera debe obtener un hardware extra ni es necesaria la descarga de distintas aplicaciones para efectuar el pago. La manera de trabajo es del llamado “Software As Service” (SAS), es decir un pago por uso.

Sin embargo, su implementación no es fácil cuando el consumidor no elige este tipo de vehículos. “No siempre se toman en cuenta factores muy importantes como reducir los picos de potencia o usar la energía cuando es más económica”, expuso el encargado de negocios.

Los algoritmos de carga inteligente son capaces de reducir: un 80% de los picos de carga, un 50% los costes de las mismas, un 70% en la carga de las emisiones de dióxido de carbono y un 40% en la degradación de la batería de los vehículos eléctricos.

“No solo reduce la potencia y se paga menos, sino que también permite operar cinco veces más vehículos con la misma potencia eléctrica. No se sobrecargan las redes ni se debe ampliar la infraestructura”, declaró.

A la hora de reflexionar sobre las necesidades para una transición completa, Mandel confía en que la educación y el conocimiento es una base fundamental. Además, sostuvo que reforzar la infraestructura de recarga pública también sería un gran avance, ya que juegan en contra a las facilidades del motor a combustión.

El mercado y el futuro de Biapower

La expansión de este tipo de productos trae beneficios hasta a los más experimentados en la materia. Tal es así que la compañía planifica la llegada a Amsterdam, principalmente, ciudad ubicada en uno de los países referentes en electromovilidad.

Aunque para no ir tan lejos, en España se encuentran participando y preparando proyectos piloto para optimizar el software para que el motor responda de una mejor manera a las señales de las redes.

“Se vienen los mercados de respuesta a la demanda, donde el vehículo eléctrico va a interactuar con la red y va a ser un jugador activo en el balance de la red”, finalizó Mandel.