En su intervención, advirtió a los asistentes que la movilidad por la que apuesta el sindicato es de 0 emisiones y no sin vehículos, como al parecer pretenden algunos políticos y sectores de la sociedad.

Carmona insistió en que “las personas deben tener posibilidad de decidir libremente con qué coche desplazarse y dónde”, siempre sobre la base medioambiental, “y no ser obligadas a cómo y dónde”.

Asimismo, es imprescindible que los ciudadanos tengan la oportunidad de adaptarse a la reglamentación relacionada con el cambio climático con vehículos 0 emisiones que sean asequibles.

El énfasis también estuvo en la necesidad de que haya una cantidad suficiente de puntos de recarga suficientes y una normativa uniforme tanto dentro de nuestro país como en Europa.

“Ninguna de las medidas que se están adoptando a nivel europeo y nacional está teniendo en cuenta el impacto negativo de las mismas sobre el empleo y en movilidad”, recalcó.

Es frente a esto que lanzó un pedido a los gobiernos para que, antes de adoptar cualquier medida medioambiental, valoren su repercusión en el conjunto de la industria automovilística y articulen respuestas dirigidas a evitar resultados perjudiciales para las empresas y el empleo.

En cuanto a la situación presente y futura del sector, Jordi Carmona valoró: “La actual escasez de semiconductores y las consecuencias de la invasión de Ucrania, aún están siendo negativas».

A lo que agregó: «No deben hacernos perder de vista la dimensión global de la transformación que se está llevando a cabo en la industria en general y en la del automóvil en particular”.

Por ello, y para hacer frente a la actual coyuntura, pidió que se activen respuestas que establezcan el mecanismo red de protección para los trabajadores y trabajadoras, así como la prórroga del contrato relevo.

Este conjunto de medidas “deberían poder debatirse y acordarse en una mesa de trabajo con presencia de los agentes del sector y del Ministerio de Industria”.

Esto, ya que “preocupa la pérdida de trabajo que está sufriendo y sufrirá el sector automovilístico en los constructores, empresas de componentes, los talleres de reparación, los concesionarios y, en general, el conjunto de la cadena de suministros”.

Por último, recordó esta cadena “es fundamental tanto para potenciar el tejido industrial de España, como para asegurar el crecimiento del PIB estatal, mantener el volumen de empleo».

Hoy en día este está cifrado en 2.000.000 personas trabajadoras.

En definitiva, resumió, “se trata de un sector estratégico, tecnológicamente puntero y generador de empleo de calidad y con derechos”.