El Negociado de Energía del país dio el primer paso hacia lo que será una próxima instalación de cargadores en el territorio.

Se trató de una mesa de diálogo virtual con más de 40 actores públicos y privados que duró más de cuatro horas, donde se intercambiaron ideas con el objetivo de avanzar en la elaboración de un reglamento que facilite la construcción de puntos de carga y viabilice la adopción de vehículos eléctricos.

“El Negociado de Energía lo que quiere establecer es un pie forzado de intercambio. Hoy el Negociado no tiene ninguna posición sobre cómo establecerá la reglamentación final de este asunto”, señala Edison Avilés Deliz, presidente de la institución.

Luego, agrega: “Por eso es bien importante la reunión de hoy dado que los participantes tienen un conocimiento técnico muy bueno y el Negociado lo quiere, de forma tal que el reglamento final que se adopte sirva al país”.

Pensando desde el punto de los ahorros que supondría la implementación de los vehículos eléctricos en comparación a los de combustibles fósiles, para Puerto Rico esta sería una decisión muy conveniente.

Según la autoridad, un vehículo de combustión, con el precio de gasolina a $3 por galón, tiene un costo de milla guiada de 12 centavos. Un cargador eléctrico conectado a la red de la Autoridad de Energía Eléctrica, con un costo de kilovatio hora como el actual de 21 centavos, reduciría el costo de operar un vehículo a 5 centavos por milla guiada. Si se supliera de energía renovable, el costo bajaría a 3 centavos por milla guiada.

Aunque se trató tan solo del primer encuentro de debate, los expositores pudieron dar sus puntos de vista sobre varios ejes importantes planteados:

• Crear un ambiente amigable de inversión para promover el despliegue de estaciones de carga eléctrica necesarias, “las cuales deben basarse en energías renovables, dado que estas no tendrían sentido si se nutren de fuentes fósiles” aclara Avilés.
• La ubicación de estos cargadores, qué hacer con las estaciones existentes y cómo se trabajará con los entes de regulación y municipios.
• Cómo se realizará la conexión a la red.
• Qué debería hacer el Gobierno para viabilizar económicamente esta infraestructura, ya sea, por ejemplo, a través de préstamos o exenciones tarifarias.
• Cómo proveer una infraestructura tal que se adapte a las necesidades de los cargadores del futuro. “¿Se va a pensar en lo que existe en la actualidad o en lo que se avecina?”, cuestiona el presidente del Negociado.
• Cuáles serán los protocolos y tipos de carga que se implementarán.
• Quién tomará la iniciativa en este tema, ¿el sector privado o público?; quién venderá el servicio; cómo planificar las tarifas; si habrá o no servicios extra que se complementarán con la infraestructura de carga.

El próximo paso será, tras la contemplación de todos los comentarios, elaborar un borrador, el cual volverá a pasar a debate. Luego, finalmente, se pasará a la redacción de la reglamentación misma.