Chile | Vehículos Eléctricos
jueves 23 de febrero de 2023
Tras acuerdo por electromovilidad, más empresas evalúan mercado en Chile según medición de emisiones
Los vehículos eléctricos obligarán a cambiar muchos modelos de negocio de la industria vinculada a la combustión, en este caso, uno ligado a la medición de emisiones y la huella de carbono.
Compartí la nota

Purexhaust S.A. se comprometió en el Acuerdo público-privado por la Electromovilidad de Chile en 2022 a ofrecer un servicio de medición de emisiones y el cálculo de la huella de carbono al 100% de las flotas que están evaluando electrificar sus vehículos o máquinas.

Y es que, empresas de estas características deben ir encontrando alternativas en el negocio, atendiendo a la potencial masificación de los vehículos eléctricos.

“Hay oportunidades en tecnologías de control de emisiones”, confirma Robert Fraser, gerente general de Purexhaust S.A. y agrega: “Todo está bajo evaluación y habrá una necesidad que se ajuste al modelo de negocio”.

Admitiendo que en el mercado de Chile hay un gran movimiento hacia la electromovilidad, la firma considera que es importante que si una empresa está analizando convertir su flota diésel o a gasolina a electricidad también tiene que saber cuál es el beneficio porque no se hace solo por iniciativa o por ser una buena idea.

El beneficio mencionado normalmente está asociado a emisiones o a la huella de carbono, por lo que es necesario conocer esta línea de base compuesta por material particulado y dióxido de carbono para cuantificar el impacto real de la inversión.

“Todos los cambios se están haciendo a grosso modo, pero las necesidades específicas todavía no se saben”, refiere Fraser.

Y advierte: “Un vehículo nuevo diésel que hoy cumple con la norma Euro 6 tiene más emisiones de particulado de los frenos de los neumáticos que del escape, y eso es algo que igual va a seguir entre nosotros”.

Purexhaust es parte de VERT, una asociación dedicada a la promoción de la mejor tecnología disponible para el control de emisiones que entiende que, según los datos recopilados en el viejo continente, probablemente habrá vehículos a combustibles fósiles por 28 años más, luego de que se venda el último.

“La visión en Europa es que estamos virando a una transición en 2035 para bajar el uso de combustibles fósiles, pero no se van a eliminar los de diésel o gasolina de la calle que ya existían a ese momento”, refiere Robert Fraser.

Otra línea que deben tener en consideración es la de los e-combustibles, biocombustibles o alternativos como, por ejemplo, el etanol o el hidrógeno verde.

Purexhaust está dispuesta a apoyar estos cambios y sus futuras necesidades, considerando que ofrecen sus servicios en el sistema de transporte público de la Región Metropolitana y en la industria de maquinaria pesada.

“Todavía no hemos captado todo lo que significa, solo sabemos que va a pasar”, cierra el gerente general.

Destacados.