Picap llegó a la Ciudad de México en octubre del 2018, como una novedosa opción para resolver el problema de movilidad, de los casi 9 millones de habitantes, ofreciendo el servicio de transporte de pasajeros en moto mediante una aplicación móvil creada en Colombia en el 2016.

Hoy, Pibox, la división de entregas de paquetería y mensajería de Picap, es la empresa de logística con mayor crecimiento en Latinoamérica durante el 2020.

En la región México y Centroamérica se realizan 150 mil viajes combinados donde aproximadamente el 30% es transporte y el 70% mensajería. En Colombia se supera el medio millón mensual con foco en transporte.

Además, están presente en Brasil y abriendo, a través de socios estratégicos, Paraguay y Guatemala. Los próximos serán Perú con posibilidades de llegar a Chile y Panamá.

En las últimas semanas se conoció que las empresas sumarán vehículos eléctricos a sus flotas de Colombia y México. Sobre esto, Daniel Meléndez, Country Manager de Picap México, indica: “Es impacto social, pero mayormente es económico. El costo de la gasolina es muy significativo, por eso actualmente validamos el modelo eléctrico”.

Daniel Meléndez, Country Manager de Picap México

“Si los resultados son los esperados, creemos que, en cuatro o cinco meses solo con el ahorro en gasolina, estaríamos recuperando el costo de la motocicleta”, asegura a Portal Movilidad.

El proceso de validación del modelo seleccionado se hará con 50 motocicletas, las cuales serán compradas por las firmas y entregadas a los pilotos mejores calificados con la posibilidad de adquirirlas en cuotas con las comisiones.

Puntualmente para México, el plazo estipulado es este trimestre en Querétaro y León.

Tal es así que se proyecta expandir el modelo a ciudad de México durante el segundo trimestre del año y tomar una forma más proactiva de escalar de cara al 2022.

Actualmente en el servicio B2B, los clientes de Pibox México pueden optar por que su paquete sea entregado en moto eléctrica y se espera darles las mismas oportunidades a los usuarios finales cuando termine el proceso de validación.

Respecto a la infraestructura de carga, Meléndez sostiene: “Es un gran reto a resolver, específicamente lo relacionado al tiempo. Hablamos con tres proveedores y no hemos encontrado soluciones con la eficiencia requerida, debemos considerar al menos 15 minutos para el intercambio de baterías”.

Por tal motivo se evalúan dos grandes posibilidades: cada conductor se hace responsable de su batería o se crea un centro de recarga.

“Un piloto recorre entre 140 y 180 kilómetros diarios y una batería promedio da 70, entonces se considera por lo menos dos cambios de batería al día”, ejemplifica.

En paralelo se analiza la posibilidad de comprar cuatro unidades de bicicletas de carga eléctricas. Aquí la barrera también sería la autonomía dado que es menor a la de las motocicletas.

Por lo que refiere: “Tenemos buenas respuestas por parte de los proveedores. Lo mismo con las instituciones gubernamentales locales y asesores, aunque todavía no lo vemos reflejado en las leyes”.

Por caso, las entidades financieras “encontraron una oportunidad de negocio enorme”.