Electromovilidad UAI (EMUAI) nace el año 2017 como un proyecto organizado por iniciativa propia de diferentes estudiantes de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Adolfo Ibáñez.

Uno de los objetivos iniciales de la organización fue la construcción de un auto solar que se concretó en 2018. “El proyecto en el que estamos trabajando ahora es el de nuestro próximo vehículo solar. Está diseñado para ser lo más eficiente posible, por lo que tiene su estructura hecha con fibra de carbono y una forma aerodinámica (y futurista) para aminorar las pérdidas energéticas”, cuenta a Portal Movilidad, Oliver Stehr, Team Manager de EMUAI.

La unidad contará con un motor eléctrico de los más eficientes del mundo, con alrededor del 95% de eficiencia y con un sistema de telemetría que permite obtener datos importantes para la toma de decisiones durante la carrera en la que va a competir y que servirán para ir mejorando el diseño.

“Actualmente, como equipo estamos muy enfocados en la difusión del proyecto, ya que nuestra misión y visión van muy ligadas a educar y motivar a las personas con respecto al desarrollo de la electromovilidad”, comenta Francisca Ramírez, jefa del Departamento de Fundraising y vocera de EMUAI.

Asimismo agrega: “Para lograr un crecimiento en la movilidad eléctrica del país, es clave hacer este cambio de pensamiento, entender que la electromovilidad es un paso muy importante para el cuidado de nuestro país, y va a lograr grandes cambios si y sólo si, todos y todas somos parte de este proceso”.

Consultados sobre qué segmentos de la movilidad eléctrica consideran que deben ser tratados académicamente, Oliver Stehr mencionó: “Se necesita innovar en el almacenamiento de la energía, ya sea con baterías o con celdas de hidrógeno, ya que son lo único que retrasa la gran adopción de la electromovilidad gracias a su alto costo, peso y volumen por unidad de almacenamiento”.

“En Chile específicamente, tenemos un gran potencial para producir hidrógeno verde y también contamos con grandes reservas de litio, necesarias para las baterías actuales. Este potencial no lo podemos desaprovechar y para esto también se necesita de una educación profesional en el tema”, añadió el profesional.

En esta línea, consideran que a largo plazo, va a ser necesario mejorar los métodos para reciclar las baterías, ya que sus componentes químicos son escasos y contaminan mucho en caso de ser desechados.

En cuanto a acuerdos o convenios, EMUAI actualmente no está participando en ningún programa gubernamental, pero no descartan concretarlo ya que, entre otras cuestiones, les  interesa el patrocinio de la Seremi de Energía enfocado en el desarrollo de la electromovilidad.

Por último, y como continuación de la educación con el ejemplo, cabe destacar que la universidad cuenta actualmente con dos estaciones de carga para vehículos eléctricos, en el edificio C de la sede de Peñalolén.

Al respecto, Francisca Ramírez comenta: “Es muy importante para nosotros como equipo que la universidad sea parte de este proceso, y podemos ver que la electromovilidad y el cuidado del medio ambiente son temas de suma importancia para la Universidad Adolfo Ibáñez, por lo que creemos que en un futuro próximo, podremos tener más vehículos eléctricos en la universidad”.