Durante el ciclo de entrevistas “Personalidades” de Portal Movilidad, Jesús Requena, director de marketing y desarrollo de negocios, vaticina con buenas expectativas el año entrante.

Respecto a 2021, el ejecutivo resalta que «el mercado de vehículos eléctricos acabó en 80 mil unidades nuevas y 20 mil de ocasión”. Y para los próximos meses, confía en que “va a seguir al alza con un crecimiento de dos dígitos”.

La empresa proyecta crecer en 2022 duplicar el índice que suceda en el mercado. “Si crece un 10 por ciento, nosotros debemos hacerlo en un 20″, precisa Requena. El objetivo de la firma es «siempre doblarlo», aclara Requena.

El experto se basa en que los proyectos de infraestructura de recarga irán acompañando el mayor número de rodados eléctricos en las calles. Al mismo tiempo, señala que esto supone un desafío tecnológico para mejorar la competitividad y servicio a los usuarios.

Uno de los aspectos centrales para Schneider tiene que ver con las mejoras en el desarrollo de software. “Será muy necesario un mayor nivel de digitalización”, puntualiza.

La tecnología, según Requena, deberá ser mejor administrada a la hora del consumo eléctrico. “El vehículo eléctrico no es solo un punto de recarga, sino que implica una transformación de la red de distribución”, explica en cuanto a cómo se deberá gestionar esa energía. 

Y en relación al software, comenta que se deberá incorporar la inteligencia artificial para permitir esta optimización de la gestión. En efecto, la analítica brindará sugerencias para una mayor eficiencia sobre el uso de la energía.

Esta herramienta permitirá tener una mejora en el mantenimiento de las infraestructuras de los vehículos eléctricos. Sobre todo, con la utilización de la plataforma de constructor en analytics.

Además, agrega que de esta manera se reduce la necesidad de reparación de los puntos de carga. En este sentido, apunta que operando de una forma “proactiva”, aprovechando la información del sistema «analytics», es posible prevenir y optimizar el funcionamiento durante el suministro.

La idea Schneider Electric Iberia es que las instalaciones de puntos de carga perduren en el tiempo entre 15 y 20 años. Con la incorporación del software y una buena distribución de los recursos energéticos asegura que “es viable”.

La empresa pretende encarar proyectos de varios postes de recargas, lo que es “una instalación intensiva de necesidad eléctrica”.

Buenas expectativas 

Respecto al plan MOVES II, que impulsa ayudas para la compra de coches eléctricos, a modo de balance valora que “es un habilitador clave”.

Sobre el futuro de este plan y la expansión lanzada hace un mes llamada Moves Flotas, comenta que el «foco debe apuntar en esa dirección».

Las empresas que deseen encarar una electrificación de su flota, contarán con la ayuda del Gobierno de hasta 4 mil euros de la inversión por vehículo. 

Este plan comenzó con ayudas para la compra en los coches eléctricos y fue perfeccionándose para un mejor aprovechamiento. Este se encuentra en su tercera etapa en este momento, que dio mejorar y más garantías que su antecesor el Moves II. 

El directivo de Scheiner comenta que «en lugar de recibir esa subvención una vez hecha la instalación, sería bueno que cuando se la afronte ya se cuente con ese dinero”. De recibir esa cuantía con antelación se puede afrontar un proyecto con más seguridad y confianza.

Problemas con ayuntamientos

La burocracia utilizada en los ayuntamientos para la obtención de licencias presenta retrasos y hace que la industria se retrase. “Si ponemos frenos, no alcanzaremos los objetivos marcados”, enfatiza Requena.

En este marco, sobre la solicitud de licencias enfatiza que deben darse una manera más sencilla y rápida posible. “Se debe facilitar este despliegue”, dice Requena

Es por esto que de armonizarse las leyes entre los ayuntamientos, se «facilita lo necesario para realizar una infraestructura» y la velocidad de los proyectos será más ágil.