La encargada de la cartera de Industria,  Comercio y Turismo, Reyes Maroto, brindó detalles del avance del PERTE durante la entrega del premio Mejor Coche del Año en España.

En este marco, anunció: “Estamos en la última parte de la tramitación para la convocatoria para financiar la cadena de valor industrial y fabricar el vehículo eléctrico y conectado en nuestro país. Una decisión que mejorará la producción y también la venta».

Crece la expectativa sobre los €24.667 millones que se esperan movilizar a través de concursos, convocatorias y licitaciones vinculados a los fondos europeos Next Generation EU.

En la primera semana de febrero, en una sesión de del Congreso de los Diputados, se comunicó que los fondos se gestionarían a  lo largo de este primer semestre del año.

A su vez, detallaron que las empresas seleccionadas por medio de las convocatorias llegarían a ser beneficiarias de más de €16.500 millones, por lo que suponen el principal foco de inversión.

«Tenemos que dar seguridad y certidumbre para la estrategia de esta industria», sostuvo.

Maroto guiñó al sector: «Los vehículos electrificados producidos en España en 2021 fueron ya el 11% de la producción en España. Esto, por tanto, genera confianza en el acceso a estos segmentos y acelera las matriculaciones, permitiendo así la colaboración pública y privada».

Frente a un escenario colmado de ansias, los pasos que restan dar son las aperturas de convocatorias.

Las mismas constarán de la presentación de proyectos por parte de las empresas interesadas, donde cada una tendrá tres meses para tramitar y desplegar los documentos necesarios.

Actualmente, ya hay una serie de actores que se han comenzado a posicionar fuertemente para obtener una porción de los casi €3.000 millones, dispuestos al aceleramiento de la penetración del coche eléctrico y su desarrollo tecnológico en España.

Aspirantes al PERTE

Por una parte, se encuentra el proyecto liderado por Seat y el grupo Volkswagen para el desarrollo del coche eléctrico en Martorell, el cual cumple con todos los requisitos para optar a las ayudas.

Mediante el mismo el grupo alemán busca comenzar a ensamblar tres modelos eléctricos de las marcas Cupra, Skoda y Volkswagen.

Según los detalles dados hasta el momento esta iniciativa cuenta con una previsión de llegar a los 500.000 vehículos al año y a un volumen global de 900.000, teniendo en cuenta las unidades a fabricar en Pamplona.

También, por su parte el hub de la electromovilidad que busca asentarse en las instalaciones de Nissan en Barcelona, es otra de las iniciativas que ya se posiciona como una de las más resonantes dentro de las posibles convocatorias.

Finalmente, entre otros tantos, está el ambicioso plan de Volkswagen por medio del cual será protagonista de una de las principales inversiones previstas dentro del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) del vehículo eléctrico. 

Los planes están basados en el despliegue de una planta que se enfoque en la producción de celdas de baterías que sirvan para abastecer las fábricas automotrices de la firma, ubicadas en Barcelona y Pamplona.