Para prever el futuro de los coches eléctricos en España es necesario detallar lo que ha ocurrido en el pasado.

Es así como el estudio publicado por Uswitch, un servicio de comparativa británico, señala la evolución que han tenido estos vehículos en el país en diez años.

El camino hacia una penetración de los coches eléctricos marca como etapa inicial el 2010 y un cero en unidades, en aquella época el país se ubicaba en los últimos lugares del continente, muy por detrás de Noruega (4.432), Finlandia (510) y Dinamarca (301).

Este resultado no se encuentra muy lejos de la actualidad. Sin embargo, según remarca el estudio, España vivió su primer registro histórico de ventas de vehículos eléctricos entre el 2015 y el primer semestre de 2016 con 5.848 unidades.

En aquella época había entrado en rigor las ayudas del plan Movele 2015, con una dotación de 7 millones de euros y que formaba parte de una estrategia para el impulso de la electrificación que empezó en 2011.

Luego llegó el plan Movea, el cual fue una medida puesta en marcha en el año 2016 que hizo parte de la Estrategia de Impulso del Vehículo con Energías Alternativas (VEA) en España 2014-2020.

Entre el 2017 y el 2018 el país vivió un incremento en las ventas notablemente. Al Plan Movea 2018 se le sumó un nuevo proyecto, el Plan VEA., el cual no solo incentivaba la adquisición de los coches sino de los puntos de recarga.

Luego llegó el plan Moves, en sus tres versiones (2019, 2020 y 2021), donde en el primer semestre de 2021 las matriculaciones se triplicaron con respecto a las del año 2019.

El dato es alentador, pero el país todavía se ubica en un puesto atrás en comparación con otros países de la región.

Sin embargo, el estudio también ubica a España en el puesto número cuatro a nivel Europa de los Estados con mayor incremento de vehículos eléctricos, con un aumento anual de 91% desde 2010.

Los primeros en esta lista son Chipre (167%), Luxemburgo (106%) e Irlanda (105%). Aunque hay países que se ubican a la delantera con ventas más estables en los diferentes periodos de tiempo, como es el caso de Noruega.

Sobre la hoja de ruta del Gobierno, este puso como fecha objetivo el 2030. Año en el que espera llegar entre tres y cinco millones de vehículos eléctricos.