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viernes 12 de junio de 2020
Promoviendo movilidad eléctrica se evitarían 435 mil muertes en Latinoamérica hacia 2050 estima Naciones Unidas
Así pronostica el informe regional sobre movilidad eléctrica en América Latina y el Caribe (Descargar Reporte) por la plataforma MOVE de la Oficina del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
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En este documento, se indica que debido a las grandes metrópolis de América Latina y el Caribe el transporte es el responsable del 22% de las emisiones de contaminantes climáticos de vida corta en la región. Por lo que la implementación de un sistema de transporte de carga y de pasajeros 100% eléctrico contribuiría en la mejora de la calidad del aire, por consiguiente, de la salud de la población y el medioambiente.

Según estimaciones de la ONU, es posible llegar al 2030 con el 50% del transporte eléctrico en Cali, México DF, Buenos Aires, Santiago de Chile y San José de Costa Rica y alcanzar el 100% para 2050 en estas ciudades.

La electrificación del transporte permite aliviar las estructuras de salud pública, crear ecosistemas de innovación, nuevos modelos de negocios que traen consigo puestos de trabajo y la aceleración de la descarbonización de la economía.

En este sentido, los primeros pasos los dieron Uruguay que instaló un electrocorredor y Chile con la puesta en marcha de la primera ruta de buses de transporte público 100% eléctrica. Respecto a vehículos de carga continua, está la experiencia de los trolebuses en México, Ecuador, Argentina o Chile, y, por otro lado, un autobús eléctrico con hidrógeno que se probó en Costa Rica.

Está comprobado que el avance de la tecnología aplicada al transporte reporta beneficios primordiales para acortar la brecha entre los niveles de emisión de gases de efecto invernadero actuales y los escenarios que El Panel Intergubernamental del Cambio Climático marcan como necesarios para evitar los efectos catastróficos en el medioambiente.

El reporte publicado por MOVE, asimismo, destaca que se observa un crecimiento en la cantidad de programas de formación y educación asociados a la temática, lo que evidencia el interés de la industria y la sociedad en estas tecnologías.

Este impulso podría llevar a la inserción a nivel mundial de las economías latinoamericanas ya que tienen un gran potencial, experiencia e infraestructura para la fabricación de los vehículos y abundancia en los recursos minerales necesarios para la producción de baterías y otros elementos vinculados a la movilidad eléctrica.

No obstante, señala que la transición a una movilidad limpia no puede ser un paso que se lidere solamente desde los gobiernos. Si no que a pesar de que las políticas y los mecanismos de promoción y financiación facilitados por los Estados, tienen un peso crucial los grupos de la sociedad civil relacionados a la movilidad eléctrica.

En relación a esto, plantea como necesaria la visión a largo plazo y la puesta en práctica de estrategias en conjunto para optimizar los modelos urbanísticos y que sea un proceso amigable para peatones y ciclistas a su vez.

Movilidad en expansión

«Entre enero de 2016 y septiembre de 2019, se registraron casi 6.000 vehículos eléctricos livianos en América Latina y el Caribe», precisa el informe de la ONU.

Durante este periodo, el mayor volumen de estos registros se ha dado en países como Colombia, México y, recientemente, Costa Rica y República Dominicana.

En el caso de Colombia, por ejemplo, se registraron 935 motocicletas en 2018 y 1.907 de enero a octubre en 2019.

En 2019, se empieza a hacer más evidente la electrificación de otros segmentos del sector transporte como las flotas oficiales, de reparto o de transporte de carga y mercancías, así como de saneamiento público.

El reporte indica que «en materia de tecnología de vehículos pesados de pasajeros eléctricos, es importante destacar que existen algunos ejemplos de vehículos de carga continua como los trolebuses en México [22], Ecuador [23], Argentina [24] [25] o Chile [26], y, por otro lado, un autobús eléctrico con hidrógeno que se probó en Costa Rica [27]».

Buses eléctricos, la tendencia

En materia de buses eléctricos, Chile sobresale en 2019 por la puesta en marcha de la primera ruta de buses de transporte público 100% eléctrica [28].

En este sentido, Chile también destaca por ser el país con el mayor número de buses eléctricos en América Latina y el Caribe – 386 unidades, la mayoría de los cuales se ubican en la ciudad de Santiago.

Colombia anunció la adjudicación de 379 buses eléctricos para la ciudad de Bogotá y ya cuenta con flotas en operación en otras ciudades [29].

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