Un estudio realizado entre la Agencia de Cooperación Alemana (GIZ) y la consultora Hinicio reveló que para el año 2050 habrá más de 250 mil buses y más de 240 mil camiones cuya fuente de energía es el hidrógeno verde rodando en el país, dados los altos niveles de competitividad que permite esta tecnología en el transporte. 

“Identificamos que el sector transporte pesado, como los autobuses públicos o los camiones de carga, puede representar la oportunidad más grande que vamos a ver de aquí al 2050 en cuanto al consumo de hidrógeno en México”, asegura Jorge Luis Hinojosa, consultor de Hinicio. 

En ese sentido, los buses serán la opción más competitiva para el transporte público ya en 2030, alcanzando casi las 2 mil unidades en ese año, con un posterior crecimiento muy veloz.

Por su parte, la flota de camiones de carga crecerá a un ritmo mucho más acelerado que los vehículos de batería, alcanzando el 80% de la flota eléctrica y casi un tercio de todos los camiones de carga pesada en México para 2050, con más de 240 mil unidades. 

Respecto a estos números, Hinojosa explica: “Para 2030, el adquirir un vehículo de transporte público impulsado por hidrógeno podría tener el mismo costo que uno convencional, teniendo en cuenta el ciclo de vida entero del vehículo”. 

Y agrega: “En cuanto a camiones de carga pesada, la competitividad se logra antes. Para 2024 ya podría ser una opción más competitiva que los vehículos eléctricos a batería, y para 2030 ya tendríamos competitividad en términos económicos y con menos emisiones, lo cual creemos que va a acelerar el despliegue de esta tecnología”. 

¿Qué sucede con las estaciones de recarga?

Para 2030 proyectan alrededor de 6 mil toneladas por año de hidrógeno verde suministrando a estos autobuses y camiones de carga pesada, mientras que para 2050 esperan más de 1.7 millones de toneladas al año. 

Esto significará un crecimiento en el despliegue de estaciones de recarga o repostaje de hidrógeno en el país, que va a ir aumentando conforme se incremente la flota vehicular y la demanda de estos vehículos hasta llegar a 450 estaciones en México para 2050 únicamente en estos segmentos. 

¿Qué significa esto en términos económicos?

“A diferencia de otros segmentos, es más caro de suministrar a un vehículo por la infraestructura de recarga, por su compresión, que llevarlo a una salida de planta para un proceso industrial. Como consecuencia, esto se ve reflejado en un mercado más grande”, advierte Hinojosa durante el webinar Puebla: detonando el hidrógeno verde desde lo local. 

Siguiendo esta línea, hacia 2050 podría haber un mercado de alrededor de 6 mil millones de dólares por año, simplemente para el suministro de autobuses y camiones de hidrógeno. Esto se repartiría en 2 mil millones para el transporte público y 4 mil millones de dólares en estaciones de recarga para transporte de carga pesada. 

Para 2030 estiman sea de 90 millones de dólares por año, aunque el crecimiento más fuerte podría verse recién para 2050.