Los hubs de recarga comienzan a multiplicarse a lo largo del continente europeo. Cada vez son más los proyectos de este estilo que requieren de una infraestructura eléctrica superior a la que se utiliza para los puntos de recarga de media y baja tensión.

Y es que la electrónica de potencia será un factor clave para el futuro de la movilidad eléctrica. En la actualidad las plataformas existentes son de 20 kW, aproximadamente.

Ignacio Díaz, Business Director eMobility en Huawei, puntualiza en que se alzará mucho la densidad de potencia para que existan puntos de recarga válidos para camiones o vehículos de gran porte, con potencias superiores a los 150 kW.

“Son muchos los aspectos a tener en cuenta a la hora de desarrollar un hub de recarga, partiendo de la energía base que es la electrónica de potencia. Afrontamos múltiples retos”, comenta.

Según señala, además de cómo deberían crearse esos puntos de carga, se deberá mirar el tipo de tecnología. En China, por ejemplo, operan hubs de 800 kW para carga.

Díaz explica que en esos casos se deja de hablar de un punto de carga sino de hub y de cómo gestionarlo.

“Lo que planteamos son las plataformas más avanzadas partiendo de una calidad altísima, no puede pasar que un cargador no funcione, porque encima que tenemos pocos, las perspectivas y los retos son muy grandes a nivel tecnológico”, declara el Business Director. 

Además, a este punto añade que no es viable llenar las gasolineras de puntos de recarga, porque surgirá el problema de dónde aparcar los camiones.

Estos hubs de recarga no solo podrán funcionar como lugares para cargar vehículos sino que podrían alcanzar funciones híbridas con sistemas de almacenamiento en las redes de recarga de alta potencia.

“Reducen la acometida a red, el impacto a nivel de costes de opex y da mejor flexibilidad. También nuevos flujos de caja y es una solución elegante y permite mayor agilidad”, comenta Díaz.

El usuario como centro

A pesar de los avances tecnológicos en los que están trabajando compañías como Huawei, el director de e-Mobility expresa que no se debe deja a un lado la experiencia del usuario.

“Nos centramos mucho en los flujos de caja, que son muy interesantes para lanzar el negocio, pero hay que tener en cuenta que los cargadores ya instalados no dejen de operar. Y que su calidad y fiabilidad son clave, porque todavía hay mucho reticencia”, comenta Díaz.

Su visión indica que esta situación de rechazo es normal dado que es “natural” que una persona sea reacia a los cambios. Luego de ver esta situación se debe mirar a futuro.