Cada vez más los usuarios eligen los patinetes y bicicletas eléctricas como su medio de transporte, pero un punto de conflicto hasta ahora había sido el aparcamiento de estos, especialmente en las grandes ciudades.

Algunos ayuntamientos comenzaron a restringir los espacios de estacionamiento de estos, a diseñar áreas específicas y, sobre todo, a imponer sanciones de hasta 200 euros para aquellos usuarios que dejan el patinete de cualquier manera en la acera. 

Sin embargo, una de las soluciones que comenzó a hacerse más visible en las distintas Comunidades Autónomas fue la propuesta de YupCharge.

“Llevamos cerca de dos años fabricando y comercializando TRAP, un parking para aparcar y cargar patinetes privados”, resalta Elvi Mármol, Key Account Manager de YupChange a Portal Movilidad.

Estas estaciones cuentan con espacio para cuatro vehículos, el cual puede ampliarse según la necesidad. Además, un detalle que no pasa desapercibido es que pueden usarse tanto en interiores como en exteriores. 

Esto significa que pueden ser usados como respuesta para los usuarios que viven en edificios y que tengan problemas o prefieran no subir el patinete hasta sus domicilios. También cuentan con un casillero inteligente para el casco y accesorios personales.

Recientemente han sido implementados por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, ubicándolos así delante de la entrada de las oficinas municipales. 

Asimismo, son utilizados en almacenes, supermercados y en lugares deportivos para así impulsar el uso de este tipo de movilidad sostenible.

El futuro de los patinetes en las ciudades

La Dirección General de Tráfico (DGT) quiere regular el uso de estos vehículos a través de un certificado.

Lo que se busca es evitar que los patinetes excedan la velocidad máxima de 25 km/h; además de combatir los accesorios no originales, como sillines o añadidos al chasis que pueden resultar peligrosos en caso de accidente.

Esta medida se toma por el aumento de estos vehículos y el interés que se mantiene cada vez más en alza. Eso sí, sigue sin ser necesario un carnet de conducir para manejarlos. Además, este certificado deberá ser expedido por los fabricantes.

El certificado entrará en vigor tras la publicación del manual de la DGT, por lo que todavía no hay una fecha establecida.