Así como las máximas autoridades del Perú trabajan en una normativa con la cual se regula principalmente la infraestructura de carga y la interoperabilidad, en paralelo y de la mano, se desarrolló esta aplicación móvil para acelerar la transición a la movilidad eléctrica.

El objetivo inicial de la aplicación fue revisar la metodología que permita realizar la evaluación técnico económica y un análisis medioambiental de la electrificación del transporte privado.

Asimismo, el principal foco es generar un mapa interactivo de la red de recarga de vehículos eléctricos en el país.

El software fue diseñado por una empresa local y el aspecto metodológico para realizar los análisis corre por cuenta de SISERCOM, la consultora chilena que también tiene a su cargo el desarrollo de la normativa mencionada anteriormente.

La metodología de la evaluación medioambiental es determinada por el costo total de adquisición y el análisis de desplazamiento de emisiones. Es decir, el usuario marca el inicio y fin de su ruta en un escenario base, selecciona los tipos de vehículos a combustión cargados en el sistema, y obtendrá el resultado de las emisiones que genera ese desplazamiento con el transporte elegido.

Además, podrá definir el escenario de movilidad eléctrica que vendrá acompañado por una evaluación técnico económica de lo que implica iniciar la transición según el tipo de transporte con la posibilidad de arrojar opciones en micromovilidad y automóviles.

“Me puede entregar un equivalente de mi motor a combustión en eléctrico junto con un TCO para entender qué me significaría el cambio, así como la reducción de emisiones”, explica Hernán Nilo Fernández, CEO de SISERCOM, a Portal Movilidad.

Y agrega: “Las simulaciones y las validaciones fueron las etapas más complejas, que se trabajó de la mano con el MINEM para garantizar los resultados correctos”.

En ese sentido, indica que a fines prácticos “la idea es que la aplicación ayude en la interacción entre el usuario y la red de carga”.

“Se busca facilitarles a los usuarios la localización de los puntos de carga habilitados y compatibles con su vehículo eléctrico, con la respectiva identificación de tipo de conector, potencia y características específicas de la ubicación, por ejemplo si se encuentra en un mall detallar en qué piso y dónde se debería solicitar la tarjeta para iniciar el proceso de carga, todo esto acompañado con un mapa de la red carga”, sostiene.

Sin embargo, cabe destacar que esta herramienta no está pensada para un posterior uso de gestión y cobro por la carga dado que el Estado no puede ser parte del modelo de negocios, las empresas que se hagan cargo de la infraestructura deben tener su método de pago propio.