Primero Barcelona y luego Valladolid. La primera ciudad adoptó la medida de que los patinetes eléctricos no pueden cargarse dentro del transporte público por prevención y seguridad. Luego el alcalde de la segunda, Óscar Puente, se declaró en público como no-amigo de este vehículo.

“Aquí no hay patinetes de alquiler porque no quise; me declaro su no-amigo”, declaró el alcalde. 

Portal Movilidad España conversó sobre el tema con Manuel Arauco, General Manager Spain & Israel en Tier Mobility: “Respetamos la opinión, pero creo que sería importante evitar prejuicios por falta de información y conocimientos”.

Al igual que en Barcelona, Valladolid opina que se trata de un medio que no cumple con toda la normativa de seguridad que debería tener un vehículo a batería.

En la ciudad catalana se prohibió que en determinados transportes públicos se transporte el patinete eléctrico dentro porque podría traer problemas en cuanto a la seguridad. Su argumento es que las baterías de este vehículo no son testeadas de la misma forma que los demás.

“Se parte de un prejuicio hacia el patinete. Es importante tener en cuenta que no es el único que tiene batería y se lo carga en el transporte público. Se está dando un trato diferenciado y se pierde de vista cuál puede haber sido el problema real”, dice Arauco.

Pero, a diferencia de Barcelona, en Valladolid no están permitidos los operadores de patinetes, por lo que este tipo de vehículos son desincentivados desde el ayuntamiento.

Además, Puente mencionó que es un medio de transporte para “holgazanes” y que es promotor del sedentarismo.

A esto Arauco explica: “Es importante hablar de que el patinete compartido sigue un modelo similar al de la bicicleta, por lo tanto no promueve el sedentarismo”.

Y con respecto a la seguridad, también lo compara con la bicicleta diciendo que se debe evitar hablar sin datos. La accidentalidad de los patinetes compartidos sería incluso menor al de las bicicletas.

“El patinete compartido es parte de la solución de los retos a los que se van a enfrentar las ciudades”, comenta el Country Manager.

Además, otro punto que puso en debate el alcalde fue que quita usuarios al transporte público. Para el directivo de Tier ocurre lo contrario.

“No está quitando usuarios al transporte público, hay que trabajar mejor para que estén conectados, es complementario y existen muchas integraciones que se pueden hacer”, explica.

Tier actualmente está conectado a 250 operadores de movilidad, entre privados y públicos, donde se ofrece este tipo de movilidad.

Otro ejemplo, en donde se aplica el patinete eléctrico en el transporte público, es el de EMT: Madrid Mobility 360, en donde se integró a este vehículo.