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martes 15 de marzo de 2022
Para T&E el impacto de la guerra es una oportunidad para la movilidad eléctrica
El conflicto bélico que se ha desplegado entre Rusia y Ucrania lleva a que Transport & Environment (T&E) fomente una mayor apuesta por modelos de eficiencia energética e implementación de buses eléctricos y movilidad compartida en las ciudades españolas.
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Hoy en día en Europa ya se nota un impacto directo en los carburantes, siendo así que particularmente en España la gasolina ya alcanzaba la semana pasada al menos dos euros por litro en 23 gasolineras. 

Frente a esta realidad, los modelos de movilidad sostenible y eficiencia energética comienzan a posicionarse.

Así es como Carlos Bravo Villa, representante de Transport & Environment (T&E), en diálogo con Portal Movilidad España, plantea: “Deben optarse por políticas basadas en la implementación de buses eléctricos, movilidad compartida y energías renovables”.

Reconociendo el hecho de que todavía hay una gran dependencia de los combustibles provenientes de Rusia, se destaca que este no es el caso de España.

Esto se debe a que el porcentaje que se importa es “realmente escaso”, pero pese a ello deben aplicarse medidas urgentes para evitar conflictos futuros.

Según el especialista, las mismas deben inclinarse hacía el “fomento a la eficiencia energética y a la producción de energías renovables”.

Recientemente, la ONG ha recomendado que las estrategias para afrontar estos periodos marcados por el conflicto bélico incluyan medidas para sobrellevar la disrupción del mercado del petróleo.

Todo esto incluye desde más días de teletrabajo y días sin coche, hasta la redirección de los fondos de recuperación para respaldar la disponibilidad masiva de vehículos eléctricos en el mercado. 

Asimismo, recuerda el hecho de que la Ley de Cambio Climático propone que en 2030 habría un 72% de energía renovable, plazo que podría acelerarse en medio de este contexto internacional.

“Es necesario llegar al 2030 a una producción 100% renovable, de manera que nuestros puedan funcionar perfectamente con energías verdes y así descarbonizar mucho más rápido el medio ambiente”, sostiene en este sentido.

Creyendo  que todas las crisis traen algo positivo consigo, Carlos Bravo ve como el incremento de los carburantes comienza a traducirse en intensos cambios en la visión de la movilidad.

Esta tendencia ya estaba comenzando a establecerse, pero frente al escenario internacional se espera que los números se inclinen finalmente hacia la electromovilidad.

Es así, que la apuesta por los segmentos de cero y bajas emisiones se ha comenzado a consagrar.

Según las cifras compartidas por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) mostraron que las matriculaciones de coches exclusivamente eléctricos representaron un 9,3% del total en enero.

En cuanto a los híbridos, mitad enchufable y mitad a combustión, marcan un 23,7% de la cuota total del mercado. 

Por lo tanto, el 32,4% de las matriculaciones son de vehículos electrificados.

En unidades fueron 25.494 coches entregados, que superaron a los vehículos diésel por cuatro mil unidades.

Febrero marcó un aumento de las matriculaciones de un 41% en relación con enero pasado.

Mientras tanto, en lo que respecta a buses se ha estado confirmando la transición a flotas más sostenibles en gran parte de las Comunidades Autónomas por parte de la inyección de millones de euros por parte de los fondos Next Generation.

Uno de los principales ejemplos de esta gestión es el giro de 141 millones de euros para la compra de hasta 650 autobuses urbanos de cero emisiones y más de 45 vehículos eléctricos para la recogida de basuras, por medio de la gestión del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

Por lo tanto, se han otorgado un total de 195 millones para la renovación de los coches y la instalación de puntos de recarga eléctricos.

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