Chile | Opinión
viernes 26 de marzo de 2021
Opinión: Taxis eléctricos: la prueba definitiva
Francisco Larrondo Gerente General de Copec Voltex.
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En algunas décadas más, el auto a combustión interna podría ser tan solo un recuerdo, una pieza de museo. Según el último estudio de Accenture “Utilities: Lead the charge in eMobility”, para este año se proyectan ventas récord de 10 millones de autos eléctricos y hacia el año 2030, el 30% de la flota de autos en el mundo será eléctrica. En Chile, de acuerdo a la Estrategia Nacional de Electromovilidad, se prevé tener electrificado el 100% del transporte público y el 40% del privado para el año 2050.

Tomar la decisión hoy día pasa por una serie de factores. Sabemos que es ambientalmente el auto ideal, no emite gases ni partículas contaminantes, tampoco genera ruido dentro ni fuera de él, necesita menos mantenciones que un auto tradicional. Pero, por otro, también plantea una serie de interrogantes: ¿será seguro? ¿tendrá suficiente autonomía? ¿habrá suficientes puntos de carga? Sin embargo, el componente central muchas veces en la toma de decisión es el valor inicial del auto y el costo de conducción por kilómetro recorrido.

Para un conductor que recorre muchos kilómetros al día, como un taxista, esto es un elemento decisivo al momento de realizar la inversión. Si se compara el costo de la electricidad vs el combustible, es posible alcanzar un 80% de ahorro, aproximadamente, en las cargas que se realizan en promedio.

Es decir, si al mes un taxista gasta $500.000 en combustible, sólo gastará $100.000 en electricidad. Si recarga el vehículo en casa y se abastece con energía solar a través de paneles fotovoltaicos, ese costo podría llegar a ser $0. Es tanta la rentabilidad que, aunque el costo del vehículo sea alto, para un conductor de alto rendimiento es posible recuperar la inversión en solo un par de años.

Empresas de taxis eléctricos como E-Viaja y otras similares están sentando las bases para el resto de conductores de taxis, colectivos e incluso vehículos de carga y despacho logístico, ya que son los precursores de este segmento en la electromovilidad, y quienes pueden dar fe, con cifras en mano, de lo que significa en materia de rentabilidad para el bolsillo de un taxista.

Es cierto que se trata de una inversión inicial alta para muchos. Por lo mismo, el Ministerio de Energía y la Agencia de Sostenibilidad Energética (AgenciaSE) están implementando el programa “Mi Taxi Eléctrico”, iniciativa que otorgará a dueños de taxis un cofinanciamiento de $8.000.000 para el recambio de un taxi básico por uno eléctrico, la compra e instalación de cargador eléctrico domiciliario (que otorga la comodidad, independencia y seguridad de poder cargar el vehículo en su propio domicilio durante las noches), y la asesoría técnica por un año en la operación del vehículo.

En este segmento, Copec Voltex está ofreciendo a los dueños de taxis cargadores inteligentes que permiten conocer el estado de carga, energía y controlar la carga desde el celular; también permiten adaptar potencia de carga según capacidad eléctrica del hogar; además de tratarse, por supuesto, de Instalaciones certificadas con la máxima seguridad para los usuarios. Asimismo, Copec Voltex entrega apoyo a taxistas en la red de carga pública, esto es, a través de la App Copec Voltex se otorgan beneficios en la carga en estaciones de servicio y tótems urbanos.

Sin duda, dar el paso de un auto a combustión a uno libre de emisiones, especialmente para el segmento de taxis y colectivos, no es una cuestión exclusivamente ambiental, sino también económica. Y es aquí donde la electromovilidad está demostrando enormes ventajas comparativas en el largo plazo. Con menores costos de uso y mantención, un auto eléctrico puede optimizar no solo la rentabilidad de los conductores, sino también su calidad de vida y, de paso, la de toda la ciudad.

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