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martes 05 de abril de 2022
Opinión: Predicar con el ejemplo a través de vehículos eléctricos en flotas públicas
Pedro Giraldo Gerente de Desarrollo de Negocio para Gobierno en América Latina de Geotab.
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La electrificación de las flotas en el sector público es un proceso complejo que debe llevarse a cabo de forma paulatina.  

Una de las formas en que los gobiernos combaten el cambio climático es impulsando la transición de sus flotas a vehículos eléctricos (EVs). Cada vez se conceden más incentivos financieros para quienes hagan el cambio de forma proactiva, al mismo tiempo que se está limitando la venta de vehículos con motor de combustión interna e introduciendo, además, limitaciones en cuanto a los lugares donde pueden operar.

Sin embargo, el mejor enfoque que pueden adoptar los gobiernos es predicar con el ejemplo. Al electrificar sus propias flotas, pueden mostrar todos los beneficios de la electrificación de primera mano, al tiempo que obtienen las mismas recompensas. Y, lo que es más importante, pueden ayudar a otros a superar cualquier tipo de incertidumbre que pueda surgir sobre el proceso de transición hacia los vehículos eléctricos. 

¿Cómo se beneficiará una flota gubernamental de la electrificación? 

Muchos de los beneficios que las flotas públicas y gubernamentales experimentarán con los vehículos eléctricos, no son diferentes de los que obtienen los propietarios comerciales o los consumidores. Por ejemplo, algunos de los beneficios de la electrificación de las flotas gubernamentales son: 

  • Mejora de la calidad de vida al eliminar las emisiones nocivas del tubo de escape y reducción de la contaminación acústica.  
  • Disminución de los costos de explotación gracias a la reducción de los requisitos de mantenimiento y a una fuente de combustible menos costosa.  
  • Aumento de la seguridad de los conductores, ya que los vehículos eléctricos se someten a más pruebas y tienen menos probabilidades de volcar en caso de accidente. 
  • Reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, contribuyendo así a un planeta más limpio y ecológico.  

Sin embargo, hay dos factores adicionales a tener en cuenta y que son especialmente importantes para los gobiernos: la responsabilidad y la integridad. Aunque todo el mundo quiere reducir los costes de explotación, una flota gubernamental necesita especialmente ceñirse a un presupuesto, ya que es responsable ante los ciudadanos. 

A diferencia de los precios de los combustibles fósiles, que pueden cambiar radicalmente de un día para otro y están influenciados por asuntos globales externos, los precios de la electricidad son mucho más estables. Estabilidad significa previsibilidad. Los vehículos eléctricos requieren menos reparaciones y mantenimiento que sus homólogos con motor de combustión interna, esto significa que el coste total de propiedad debería ser más fiable a la hora de presupuestar los gastos. 

En lo que respecta a la integridad, la electrificación representa un cambio significativo para la mayoría de las flotas. Es algo que debe hacerse para un futuro sostenible y para cumplir los objetivos de cambio climático establecidos por el Acuerdo de París. Para ello, necesitamos la colaboración de los gobernantes que sirven y representan al pueblo. Son líderes en su comunidad y, como tales, nos fijamos en ellos como ejemplo. 

Los primeros pasos hacia la electrificación de la flota gubernamental

En Chile se promulgó recientemente “La Estrategia Nacional de Electromovilidad”, proponiendo una meta para la región de alcanzar el 100% de las ventas de vehículos livianos y medianos de cero emisiones para el año 2035. Además, indica que el 100% de las ventas de transporte público (buses, taxis y colectivos) también serán cero emisiones. A fecha de agosto del 2021, Chile ya contaba con 840 buses eléctricos que son parte del sistema de Transporte Público.  

En el caso de Argentina, el Proyecto de Ley de Promoción de la Movilidad Sustentable, aún en tratativas de aprobación, sostiene que la eficiencia energética de la movilidad eléctrica supera ampliamente a la de combustión interna, y esto se traduce en menor consumo y emisiones para igual cantidad de carga por kilómetro transportado. Además, este proyecto establece como plan, a largo plazo, que la comercialización de vehículos que funcionan exclusivamente por motor de combustión interna quede prohibida a partir del 1 de enero del año 2041, salvo casos en los que por razones técnicas se determine que no puedan ser reemplazados. 

Por el lado de Colombia, la capital del país se propuso el reto de lograr la descarbonización de la movilidad en la ciudad. Para esto, desarrolló un Plan de Acción Climática, que define como metas la reducción del 50% en la emisión de Gases de Efecto Invernadero de Bogotá para 2030

El punto de partida más sencillo y común es electrificar la flota de vehículos de pasajeros públicos. No suele haber requisitos especiales para los vehículos ni ciclos de trabajo extremos para estos casos de uso, por lo que la mayoría de los vehículos eléctricos disponibles en el mercado son adecuados. 

Ejemplos de vehículos de pasajeros de los gobiernos: 

  • Vehículos personales para empleados del gobierno. 
  • Servicios de transporte para funcionarios de la ciudad. 
  • Vehículos utilizados por los agentes de movilidad (para zonas de estacionamiento regulado) y/o los funcionarios de la ley. 

No sólo son una apuesta segura, sino que, dado que estos vehículos suelen circular por los centros urbanos más densos, tendrán un impacto significativo en la mejora de la calidad del aire. 

Vea también: El papel de Geotab en la adopción de vehículos eléctricos en el mercado chileno 

No es una flota de vehículos eléctricos común  

Hay algunos sectores gubernamentales que necesitarán vehículos más robustos. Algunos de ellos serán comerciales, como los camiones ligeros para los departamentos de parques o de seguridad ciudadana, o los trabajadores de servicios públicos. Otros van a ser ligeramente modificados y un gran ejemplo de ello son los vehículos de la policía. 

En Chile según la Estrategia Nacional de Electromovilidad define que al año 2040 el 100% del transporte público urbano sea eléctrico. Además, en la Ciudad de Santiago de Chile, la Municipalidad de Las Condes puso a disposición de la comunidad en forma gratuita 10 buses 100% eléctricos. El servicio realiza rutas para reforzar al sistema público en horas punta y en el resto del día, el transporte vecinal sirve para trasladar a adultos mayores y personas con discapacidad a consultorios, centros de adulto mayor y/o distintas actividades del municipio.  

En Argentina, por ejemplo, el gobierno nacional anunció un plan de desarrollo en electromovilidad para el transporte público urbano, que incluye el lanzamiento de un plan para el recambio de los autobuses públicos por unidades que funcionen con energía eléctrica, elaborado sobre tres ejes principales: la industrialización del litio, la incorporación de los fabricantes de autopartes y la renovación de la flota del transporte público.  

En Colombia, se desarrolló la Estrategia Nacional de Movilidad Eléctrica 2020, que busca acelerar la penetración de la electromovilidad en el país. Esto en línea con la Ley 1844 de 2017, por medio de la cual se aprueba el Acuerdo de París, comprometiendo a Colombia a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 20%, respecto a las emisiones proyectadas para el año 2030. 

Por último, hay una serie de vehículos especializados que pueden ser electrificados. En la actualidad, la mayoría de estos vehículos todavía se están probando en programas piloto, siendo los autobuses la excepción. A medida que haya más modelos disponibles, veremos un aumento de su utilización. 

Ejemplos de vehículos gubernamentales especializados: 

  • Autobuses públicos. 
  • Ambulancias. 
  • Camiones de basura. 
  • Camiones de mensajería.

Impulsando la electrificación 

Los gobiernos comprenden la necesidad de iniciar la electrificación. Al fin y al cabo, deben apoyar las políticas de cero emisiones, pero son muchos más los que reconocen la oportunidad de predicar con el ejemplo y mantener la seguridad de sus comunidades. Aunque esta transición no se produce de la noche a la mañana, ahora es el mejor momento para poner a prueba la electrificación y barajar las distintas opciones. 

Para saber más sobre la transición a los vehículos eléctricos, visite nuestras soluciones para vehículos eléctricos.  

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