La ayuda de los 20 céntimos por litro de la que disfrutaban todos los conductores se acabará suprimiendo a finales de año. Así lo anunciaba la Cadena Cope. Dicha bonificación entró en vigor en abril para compensar la subida de los combustibles a causa de la guerra de Ucrania.

A pesar de ello, los precios de los combustibles jamás pudieron alcanzar la competitividad de costes que conlleva un vehículo eléctrico. No en la inversión inicial, pero sí en el mantenimiento. 

La recarga nocturna de un coche eléctrico tiene un coste de 3 céntimos el kWh, por lo que con 3 euros este ya puede recorrer unos 100 km.

Mientras tanto si se mira un coche de combustión, dado a los incrementos de los combustibles fósiles el precio por litro está alrededor de los 2 euros dependiendo de estación y si es gasolina o diésel.

“Una persona querida de las afueras de una gran ciudad debe hacer un viaje diario a su lugar de residencia. Hace 300 kilómetros a la semana, le cuesta 3 euros a la semana o 12 euros al mes en toda su toda su movilidad. En comparación con los 140 euros que cuesta un vehículo diésel”, explica Paco Pérez Botello, presidente de Grupo Volkswagen Distribución España.

La medida del Gobierno en torno a los combustibles sirvió para aliviar, en cierta medida, el bolsillo de los que utilizaban el coche o cualquier otro tipo de vehículo a combustión para sus desplazamientos. 

En principio había intención de que fuera una solución temporal, hasta el mes de junio. Pero a comienzos de verano los carburantes volvieron a sufrir un importante repunte rebasando los 2 euros el litro.

Ya en ese momento la competitividad con el coche eléctrico era superior, ahora con esos 20 céntimos que sube el combustible sería posible cargar 6,3 kWh.

En el Ejecutivo se contempló en alguna ocasión la posibilidad de prorrogar la bonificación para todos los conductores. Entendían que la medida había ayudado a contener la inflación. Pero también eran conscientes de la enorme repercusión que tenía para las arcas del Estado.

La vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, ya insinuó hace unos días los planes del Gobierno. Únicamente se beneficiarían de esta subvención de 20 céntimos los sectores económicos más perjudicados en su trabajo por el repunte de los precios del combustible.

El resto de ciudadanos se verán privados de esta bonificación a partir del 1 de enero de 2023. Muchos conductores limitarán mucho más el uso del vehículo para moverse.

Con estas medidas podría beneficiarse aún más el coche eléctrico, más si se tienen en cuenta los precios de los nuevos coches que entran en el mercado. Los coches chinos y algunos de fabricación europea comienzan a competir en precio pero no en prestaciones, para ello hay que incrementar la inversión inicial.