¿Quién es Rafael de Mestre? Se trata de un español de Manresa, que creció en Alemania. Es ​​bailarín de competición hace 20 años, desarrollador del modelo de empresa democrática TRON y es quien ya dio dos vueltas al mundo en coche eléctrico.

Esto no queda allí, sino que tras una serie de demoras que ha ocasionado la pandemia está por escribir un nuevo capítulo de su historia con el inicio de una nueva ruta eléctrica. 

En 2012 tardó 127 días en dar la vuelta en su Tesla Roadster, en 2016 repitió la experiencia en 80 jornadas y alcanzó los 29.000 kilómetros, tres continentes, 20 países recorridos.

Rafael de Mestre y su coche

Es así que la reencarnación de Phileas Fogg, protagonista de “La vuelta al mundo en 80 días” de Julio Verne, pero del mundo de la electromovilidad, planea volver al ruedo iniciando camino desde Miami.   

Sin una ruta preestablecida y sin un equipo que lo acompañe, irá atravesando diferentes territorios y culturas sin preocuparse por dónde recargar su vehículo. 

Frente a esto, el viajero asegura: “La realidad es que en cualquier lugar donde se cuente con un enchufe se puede alimentar la batería, por lo que las redes de recarga no son una limitación en esta historia”.

Solo hay estimaciones de que atravesará gran parte de los países de Europa, Estados Unidos, Asia y podría haber posibilidades de un paso breve por Latinoamérica, pero los trámites en las fronteras son las que ponen traba a su ambición.

Cada día Rafael irá enfrentándose a nuevas experiencias, luchando por encontrar las comidas de su agrado en los diferentes destinos, promoviendo el mensaje de la electromovilidad y delineando los pormenores de un nuevo viaje a la par de su Tesla Roadster.

Este ya lo ha acompañado desde su primera experiencia, en la cual la principal meta ha sido “viajar como si el motor fuera a combustión”.

“Antes de comenzar este viaje debemos realizar un cambio de batería en el coche, por lo que espero que podamos dar inicio en marzo de este 2023”, comenta el protagonista en contacto con Portal Movilidad España.

Mientras tanto está en Kazajistán donde lleva una animada vida social, colmada por clases de baile, trabajo remoto y algún que otro recital. 

¿Cuál es la preparación del vehículo?

Al ser consultado por las modificaciones que se deben realizar en su automóvil previo a lanzarse a una aventura de esta magnitud, De Mestre niega la posibilidad de cualquier tipo de alteración al diseño o prestaciones.

“Lo único que debemos hacer es un cambio en su batería. Estuvo dos años parado sin cargarse en un museo en Múnich, por ello se le colocará una nueva y se adaptará el sistema operativo a ella”, detalla el protagonista. 

Sin poder colocar un modelo similar al que tenía, Tesla se ocupará de montar una nueva que permitirá contar con al menos 500 kilómetros de autonomía. 

Pero, ¿Dónde se realiza el cambio?

Rafael de Mestre ha debido transportar su coche desde Hamburgo hasta los Estados Unidos en barco. 

Con un acuerdo con conocidos monto al Tesla Roadster encima de un buque a vela que transportaba cacao y café por medio de una grúa y zarpó al otro lado del  charco. 

Allí lo esperaba la firma de Elon Musk para trabajar en él, pero sin atenciones especiales y cobrando cada centavo del trabajo, pese a la relación que hay entre el magnate y el viajero.

El vínculo con Tesla 

Las tres travesías de Rafael de Mestre estarán protagonizadas por Tesla, lo que da a pensar que la compañía estaría invirtiendo en esto, pero esto no es asi. 

“La empresa no financia ninguno de mis viajes. Yo la he elegido para el año 2011 y las prestaciones con las que cuenta son lo que hacen que lo haga una y otra vez”, asegura De Mestre. 

Pero que no hay una relación comercial no quiere decir que haya un vínculo entre la firma de Elon Musk y el viajero electrificado. 

“He tenido contacto en varias ocasiones con el CEO de la empresa, no se me brinda apoyo financiero pero si uno emocional muy fuerte”, explica.

A lo que agrega: “En uno de mis viajes Musk ha llegado a hacerme una fiesta sorpresa, con todos los detalles de la cultura americana. Ha sido un muy lindo gesto y se nota el interés, pero a hablar del coche no deja de tratarme como un cliente más”.

Cumpliendo el sueño de niño

Hay quienes de jóvenes planean dar la vuelta al mundo en ochenta días como lo narra Julio Verne en las páginas de su libro, como también quienes sueñan con ir a la luna. 

En este caso el pequeño Rafael De Mestre tenía una afinidad con los coches chocadores.

“Una vez subimos a uno con mi hermano. Él acelera sin ruido y sin olor y eso era lo que más disfrutaba. No de chocar sino de la experiencia en si de un vehículo eléctrico. Y allí fue donde se prendió la lámpara para crear todo esto”, recuerda. 

La película de  “Las Aventuras de Gulliver”, fueron el motor que a su vez empujaron a esta experiencia que dio con 80 EDays, la iniciativa por medio de la cual ya cuenta con dos recorridos alrededor del globo.

Esto no está ligado solo a los viajes sino a un objetivo mayor que tiene que ver con la difusión de la movilidad eléctrica alrededores del mundo. 

Las primeras vueltas eléctricas

Rafael de Mestre y Armand Figueras han dado la segunda vuelta al mundo en 80 días a bordo de un Tesla Model S. 

En total recorrieron 29.000 kilómetros, 3 continentes y 20 países.

El 16 de junio de 2016, partieron de Barcelona con el objetivo de dar la vuelta al mundo en 80 días.

Junto a ellos se sumaron a esta aventura otros diez equipos de otras tantas nacionalidades (Alemana, Suiza, Estados Unidos, Italia o Hungría entre otros).

Durante el viaje, han plantado 28 árboles que serán visitados en la nueva edición de 80 E-days, que ya está punto de estar en marcha, y se han instalado 50 puntos de carga en zonas sin infraestructura desarrollada.

Rafael se embarcó en esta misma aventura en el año 2012, también con éxito, convirtiéndose en el primero en conseguir dar la vuelta al mundo en un automóvil eléctrico.