Actualmente son dos las ciudades que cuentan con unidades eléctricas para el transporte público: Quito y Guayaquil.

En estas ciudades la movilidad eléctrica para el transporte público ocupa el 2,49% (de un total de 3.418 unidades en circulación) y el 0,40% (de un total de 5.012 unidades en circulación) respectivamente.

Según la plataforma E-Bus Radar, el total de unidades en el país alcanza las 106: 85 trolebuses ubicados en Quito, 20 estándar a batería correspondiente a la marca BYD ubicados en Guayaquil y un híbrido Zhongtong. 

Esto implica que el país debe sumar 1394 buses eléctricos a su flota en dos años para alcanzar la meta relacionada con la Contribución Determinada Nacional, a la cual se comprometió el país, de reducir los GEI entre un 9% y un 21% hacia 2025. 

Vale aclarar que actualmente se encuentran abiertas licitaciones para la incorporación de unidades eléctricas al sistema. Sin embargo, en su mayoría han habido complicaciones en torno al financiamiento, por lo que se encuentran detenidas. 

En Guayaquil, la licitación estaba dirigida a la operación del servicio público en la troncal 3 del sistema Metrovía, es decir, el Bastión Popular – Centro y sus rutas alimentadoras. Incluía en sus requisitos la incorporación de 50 unidades eléctricas y se exigía que los operadores costearan la totalidad de la inversión.

Por otro lado, en Quito la licitación que contenía rutas y buses eléctricos se vio envuelta en polémicas. Los requerimientos que sostenía la convocatoria generaron revuelo entre concursantes que decidieron abandonar la licitación, tras disconformidades en torno a los esquemas de financiamiento.

Quienes decidieron continuar y ganaron el concurso, igualmente, esperan avanzar en la incorporación de nuevas tecnologías dentro de sus flotas. Sin embargo, aún no es un hecho.

Otra experiencia de apuesta a la movilidad eléctrica es Cuenca. La ciudad ha hecho estudios para la adopción de la movilidad eléctrica como una opción para el transporte público. Se espera que en tres meses se apruebe el financiamiento para incorporar 12 buses eléctricos.

Cabe destacar que la ENEE contiene otros objetivos vinculados al parque vehicular hacia el 2025. 

Establece que el número de camiones ligeros de carga cero emisiones debe llegar a 1000 unidades, los taxis a 2000 y los vehículos ligeros a 5500. 

El total de vehículos eléctricos dentro de dos años debe alcanzar las 10.000 unidades. 

Por otro lado, para el abastecimiento de estos vehículos será necesario el desarrollo de la infraestructura de carga. Esta tarea está a cargo de los Gobiernos Autónomos Descentralizados.

Cabe destacar que al día de hoy existen 36 estaciones de carga y más de 62 cargadores en todo el territorio nacional.

Estos serían algunos de los pasos que debe dar Ecuador antes de hacerle frente a las metas dispuestas para el 2030 y 2040.