El Grupo Volkswagen y Seat, junto a las 60 empresas que integran la iniciativa ‘Future: Fast Forward’, han aceptado los 397,37 millones de euros en ayudas adjudicados a esta propuesta industrial en el marco del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC).

La principal iniciativa presentada en este marco tiene que ver con la instalación de la primera fábrica de baterías en Sagunto, la cual se desarrollará de la mano de PowerCo Spain.

Esta no es la única que se ha proyectado. Haciendo un paneo ya hay más de 30 plantas y plantaciones que se dedican a la fabricación de este tipo de insumos en el continente.

Al respecto, Antonio Garcia, especialista en transporte y profesor de la Universitat Politècnica de Valencia, pone el acento sobre un riesgo clave a tener en cuenta.

Antonio Garcia, especialista en transporte y profesor de la Universitat Politècnica de Valencia,

“Deberíamos preguntarnos, teniendo en cuenta los costes de la energía eléctrica,  cuánto tiempo esas compañías van a decidir mantener sus operaciones aquí”, plantea al respecto.

La realidad es que el escenario europeo en estos momentos es muy incierto. A causa de la invasión rusa a Ucrania los precios se han disparado y el panorama no parece cesar. 

“Probablemente la producción a nivel local deje de ser competitiva respecto a otro lugar del mundo. Entonces es razonable pensar en este tipo de probabilidades”, apunta el especialista. 

Los incrementos en las facturas podrían paliarse con el aprovechamiento de energías renovables y la producción propia de las mismas, pero eso significa una apuesta financiera que cada actor deberá estar dispuesto a realizar. 

Pero no todo es negativo. La inversión total estimada para la construcción de la giga factoría de baterías que Volkswagen instalará en Sagunt (Valencia) ascenderá a 4.500 millones de euros entre 2023 y 2026.

Ya se estima que en cuanto a la generación de empleo, durante la primera fase, relativa a la construcción, el montaje de la maquinaria y la puesta en marcha de la gigafactoría, se creará una media anual de 8.900 puestos de trabajo directos y 10.200 indirectos entre 2023 y 2026.

Cuando la planta entre en la fase de producción, se estima la creación de casi 4.200 puestos directos, de los cuales el 8% corresponderá a personal de dirección y administración y el 92% restante a producción.

La instalación de la fábrica de Sagunt también tendrá impacto sobre las arcas públicas locales, autonómicas y centrales, según el documento.

Por un lado, se prevé que el municipio de Sagunt recaudará 5,8 millones de euros por el Impuesto sobre Actividades Económicas entre 2027 y 2031, una cifra que a partir de 2032 se elevará a 9,5 millones de euros. A ello se sumarán los en torno a 2,5 millones de euros anuales en concepto de Impuesto de Bienes Inmuebles.

Frente a lo que reconoce: “Recibimos la noticia, con gran expectación y gran felicidad, es algo tremendamente en principio positivo para todo el mundo”. 

Asimismo, considera que el reciclado del material que se generará deberá ser un asunto a resolver en el corto o mediano plazo, debido a que esto no permite generar una contaminación agregada a la región de Valencia.