Además de su ubicación y acuerdos regionales, la calidad de la mano de obra mexicana resulta atractiva para la inversión en movilidad eléctrica. Basta resaltar que la mitad de los ingenieros que trabajan en Tesla han tenido formación mexicana (así lo afirman desde la Cancillería). 

Pero… ¿Cuáles son los números? Según datos de la Industria Nacional de Autopartes (INA), egresaron en todo el territorio nacional 892.996 estudiantes. De ellos, 124.384 se orientaron a ingenierías y formaciones técnicas. 

“Ha venido creciendo en los estudiantes la calidad técnica para suplir la demanda en las nuevas plantas y armadoras en nuestro país. A nivel nacional, en el egreso promedio, las carreras de ingeniería representan el 15%”, sostiene Julio Galván, gerente de asuntos económicos en INA. 

Según la asociación, dentro del espectro de aplicación para los profesionales, la industria de autopartes orientada hacia la electromovilidad ofrece dos claros terrenos: el trabajo sobre las baterías y los sistemas eléctricos. 

«Muchos se preguntan por qué Tesla o las principales armadoras se instalan en nuestro país. Se explica a partir del valor del capital humano de México. En 2019 generamos ocho mil millones de dólares (885 mil empleos), pero esos números crecieron», explican desde INA.

Y agregan: “Las empresas se reestructuraron, las líneas de procesos se volvieron más eficientes. Este crecimiento, impacto y creencia sobre nuestro país devino en que estemos produciendo arriba del promedio, que son cerca de 8.500 millones y superando los empleos”. 

Si bien varía según la jurisdicción, en el Estado de Nuevo León (donde se ubica la nueva planta de Tesla), el 15% de los egresados tienen título de ingeniería o carreras técnicas. De los 48.000 egresados, 6.732 han sido de este rubro entre 2021 y 2022. 

En otros Estados como Coahuila, su número de egresados con orientación técnica representa el 34%. De los recibidos en el 2021 y 2022 (24.380), 8.336 tienen capacidad para aportar valor en la industria de autopartes. 

“No hay que caer en la relevancia de Estados específicos porque todos tienen relevancia para poder aportar capital humano en esta industria”, sostiene Julio Galván. 

Por otro lado, desde la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) se indica que la formación de los profesionales tiene que cambiar hacia la “nueva industria”. Así lo remarcó su titular en conferencia de prensa. 

“Es positivo lo que estamos viendo en términos de los datos existentes, pero debemos ser conscientes de que las condiciones van a cambiar”, advierte Odracir Barquera, director de la asociación. 

Sigue: «Debemos prepararnos para esa nueva demanda bajo los nuevos componentes que nos trae esta transformación mundial de la industria. Necesitaremos mano de obra calificada, será una nueva industria”.