La Comunidad valenciana es una de las que lidera el PERTE para el desarrollo del Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC), con la obtención de las ayudas públicas para los tres proyectos presentados: la gigafactoría de baterías enSagunto, la electrificación de la planta Ford en Almussafes y el proyecto de Faurecia.

Pese a que se anunció la salida de Ford en el proyecto del Perte, a causa de los cortos plazos presentados de ejecución, la propuesta sigue siendo alentadora.

Se da en un contexto en que las matriculaciones de coches eléctricos en Valencia continúan aumentando a la par de las iniciativas para acelerar el despliegue de las redes de recarga.

En este marco, Empar Martínez Bonafé, Secretaria Autonómica de Economía de la Comunitat Valenciana, profundiza en conversación con Portal Movilidad España sobre las bases en las que se centra la Administración local en esta transición.

La Comunitat Valenciana se prepara para convertirse en un “hub” de electromovilidad, ¿ya están listos para que eso ocurra?

Sí, lo estamos. Uno de los objetivos que nos marcamos, incluso antes de que se desatara la actual crisis derivada de la guerra de Ucrania, era la necesaria transición energética de todos nuestros procesos productivos.

Esto incluye la electrificación de la economía, la reconversión de la industria y un cambio absoluto en nuestro concepto de movilidad, un factor muy vinculado con la logística industrial, la distribución y las cadenas de valor.

Con la guerra de Ucrania este proceso se ha acelerado y en la Comunitat Valenciana esto ha generado un efecto sincronización entre todos los actores vinculados con la transición energética.

¿Qué factores están incidiendo en este proceso?

Uno es la unidad de acción, esa alineación de objetivos que está sirviendo como elemento cohesionador.

Otro es el enorme talento, en movilidad y tecnología, que, por fin, ha salido a la luz en la Comunitat Valenciana.

¿Algo más?

A ello hay que sumar la implicación y el compromiso activo de la Generalitat con estos proyectos que, sin duda, están transformando por completo nuestro territorio y nuestra actividad económica.

Y, además, hay que tener en cuenta la disponibilidad de suelo, la continua llegada de nuevas inversiones, el establecimiento en la Comunitat de sedes de empresas multinacionales y la oferta formativa especializada, como el Master de Baterías o los ciclos especializados de FP.

Una nueva convocatoria del PERTE VEC está por llegar y hay expectativas en Valencia… 

Hay muchos proyectos valencianos susceptibles de ser elegidos para acceder a las ayudas de los PERTEs.

¿Pero?

La agilidad en las convocatorias y la adaptación a las necesidades reales de las empresas son claves para que estas ayudas sean verdaderamente efectivas y contribuyan a mejorar las prestaciones y soluciones actuales en materia de movilidad.

¿Y qué papel juega la Alianza Valenciana de Batería?

La Alianza Valenciana de Baterías se presentó el 17 de febrero de 2021. Su misión es reunir a  todas las partes interesadas en el ecosistema regional industrial en baterías, con el fin de desarrollar y apoyar una cadena de valor regional competitiva y orientada a mercados internacionales.

Es una iniciativa industrial, activa e innovadora capaz de fortalecer el tejido industrial valenciano y está alineada con los retos industriales trazados por Europa en el marco de la EBA (European Battery Alliance).

¿Cómo está compuesta?

Actualmente, cuenta con más de 40 miembros, desde los más de 20 con los que nació y está integrada por actores tecnológicos, industriales y universitarios. Se organiza a través de 4 grupos de trabajo: fabricación de baterías y componentes; aplicación en automoción; aplicación en estacionario; digitalización y nuevas tecnologías.

¿Cuál es su mayor motor?

El objetivo es posicionar a la Comunitat Valenciana en la cadena de valor de fabricación de baterías, potenciar la innovación colaborativa, promover la atracción de nuevas empresas e impulsar las capacidades y fortalezas que tenemos.

Y, de momento, se está avanzando en esa dirección. Sin ir más lejos, el 17 de marzo se coloca la primera piedra de la Gigafactoría de Volkswagen en Sagunto y eso es un hito histórico que marca un antes y un después en el panorama económico e industrial de la Comunitat.

Y de cara al sector de la electromovilidad…¿Qué señales van a brindar?

En estos momentos está habiendo una tendencia hacia el onshoring o acercamiento de las cadenas de valor, una reindustrialización o relocalización que va a permitir a las industrias ser más competitivas.

En paralelo, se está actuando para contener el alza inflacionista y, en concreto, el aumento de los precios de la energía, con medidas de compensación para empresas y ciudadanos que están ayudando a paliar los efectos negativos del aumento del precio del gas, la electricidad o las materias primas, derivados de la guerra de Ucrania.

¿Se incluyen planes de apoyo económico?

Se han puesto en marcha importantes ayudas para el sector del vehículo eléctrico, como las movilizadas por el PERTE VEC, aprobado por el Consejo de Ministros el 13 de julio de 2021.

Este se trata de un proyecto basado en la colaboración público-privada y centrado en el fortalecimiento de las cadenas de valor de la industria de automoción español, un sector estratégico para España. También, el PERTE para la Descarbonización, cuya convocatoria saldrá en los próximos meses.

Además, hay que sumar las ayudas de la Generalitat Valenciana, a través de sus líneas de apoyo a Proyectos Estratégicos, las líneas de apoyo a asociaciones empresariales, las ayudas a pymes industriales y las ayudas movilizadas en el marco del P.E.I.V. (Plan Estratégico de la Industria Valenciana), entre otras acciones.

Valencia cerró el año con 6.567 matriculaciones de coches eléctricos..¿Empujaron las ventas los proyectos de Seat y Volkswagen?

Sí y esa es la tendencia a corto plazo, aunque aún hay que hacer esfuerzos para hacer que los precios de estos vehículos sean mucho más asequibles.

Además, hay que seguir acelerando el despliegue de puntos de recarga eléctrica en la Comunitat Valenciana para garantizar una transición energética real y una movilidad eléctrica operativa y eficaz.