Europa | Vehículos Eléctricos
jueves 17 de marzo de 2022
Los nuevos retos de la electrificación que surgen por la invasión de Rusia a Ucrania
Aurelio Suero en conversación con Portal Movilidad planteó diferentes aspectos a tener en cuenta dado al escenario que actualmente afecta a Europa.
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Los países europeos desde el inicio de la invasión de Rusia en Ucrania han comenzado a acelerar los planes de electrificación pensado en la auto dependencia energética.

El coche eléctrico tiene una alternativa que los que son a combustión interna no, pueden nutrirse de energías alternativas que genera autonomía y una no dependencia de otros países para proveerse de petróleo o gas. 

Sin embargo, desde el punto de vista de Aurelio Suero, consultor sénior del automóvil, en conversación con Portal Movilidad comenta que la guerra “supone problemas a los eléctricos”.

En primer lugar, existen inconvenientes en cuanto a las importaciones de aluminio, que afecta a todos los coches incluyendo a los eléctricos.

Luego hay problemas que pueden surgir en cuanto a los suministros de materiales necesarios para las baterías, también.

Por otra parte, la guerra “por desgracia” va a impulsar una “aceleración en la industria de los vehículos eléctricos” dado al estímulo que recibirán las energías renovables, según la visión del consultor.

En España, la guerra no debería impactar en el precio del coche eléctrico, o al menos de forma tan predominante debido a la su no extrema dependencia del gas.

Retraso en el autoconsumo

Suero explica que, a pesar de esto, el país “llega tarde” al autoconsumo “de forma inexplicable”. Pero, las previsiones a 2023 muestran que el país crecerá hasta un 10% de los hogares podrán proveerse a sí mismos, si “no se tuercen las cosas” por la invasión de Rusia.

Esto hará que tener un coche eléctrico sea más sencillo si se piensa en la colocación de cargadores en garajes que dependerán de una energía generada de forma autónoma.

El retraso, según el punto de vista de Suero, viene por “motivos políticos”. Uno de esos fue el llamado impuesto al sol que “hasta el cambio de gobierno se penalizaba el autoconsumo”.

Este impuesto fue quitado hace dos años y medio, lo que paralizaba el desarrollo de uno de los pilares para el desarrollo de las infraestructuras de carga en garajes privados.

El momento de los eléctricos

Según Suero, España y Europa en general se encuentran en la “tormenta perfecta” sobre el sector de la automoción. El consultor enumera una serie de factores que harán crecer a la industria además de la guerra. 

“Están cambiando los hábitos de consumo, la movilidad se ha reducido por el teletrabajo, cambian los sistemas de distribución, los nuevos modelos de agencia”, son los factores que menciona.

Pero que, considera, que se debe impulsar más al vehículo eléctrico en Europa y que lo hecho hasta el momento “no es suficiente”. Debido a que “algunos pretenden impulsar el coche eléctrico y al térmico al mismo tiempo” y esto “es imposible”.

Igualmente, el continente se está moviendo hacia la electrificación, a cambiar los sistemas de distribución y a la implementación de “mobility as a service”.

Un problema a futuro

En el sector de la automoción existen especulaciones sobre si la electrificación causará o no desempleo a futuro y también si afectará a la economía en general.

“Yo creo que todo apunta a que en un largo plazo, de una forma estructural, la actividad económica ligada a la movilidad y, en concreto, al automóvil va a reducirse”, comenta Soria.

Desde su visión el sector “deberá reconvertirse” y prepararse para “sustituir los espacios que dejará la movilidad” como la oportunidad que existe en el mercado de las baterías, pero que “este no alcanzaría a largo plazo”.

Un estudio de Solera Audatex sostiene que si se electrifica todo el sector de la automoción se perderán cinco millones de euros al año en la facturación post venta.

Pero esto sería un beneficio para los usuarios que deberán facturar menos hacia el Estado español.

Según Suero, “esos cinco millones de euros se van a dedicar a otra actividad” y el “secreto” está en encontrar cuál es esa que va a suplir el espacio que deja la electromovilidad.

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