Diego Correa, director de Gestión de Movilidad de Cuenca, hizo público el estado de situación del plan de electromovilidad, que tiene prevista su publicación para enero del 2023. 

La estrategia comenzó a elaborarse en 2021 y se llevó adelante en cuatro fases, donde se desarrollaron las siguientes acciones: 

• Fase 1: se establecieron los conceptos, visitando universidades y autoridades para invitar a participar a distintos actores de la sociedad para que, según el director, cuenten con información y se comprometan en la elaboración y cumplimiento del plan. 
• Fase 2: se llevaron adelante capacitaciones en talleres para técnicos que versaron sobre gobernanza y política pública, transporte público y electromovilidad, infraestructura de carga, micromovilidad, taxis eléctricos, estrategias de comunicación, entre otros puntos.
• Fase 3: se viajó a países modelo como Chile y Colombia para conocer estrategias y experiencias en electromovilidad. Allí se observaron los sistemas de transporte electrificados, desde buses hasta bicicletas eléctricas. También se discutieron medidas a tomar según distintas modalidades de transporte, plazos y se crearon pilotos para probar a pequeña escala.Por otro lado, se definió la implementación de cinco proyectos de electromovilidad para observar resultados y obtener información. Entre ellos, se planea probar buses, taxis, bicicletas eléctricas y vehículos de última milla.
• La fase 4 está pendiente y tiene como objetivo definir el marco de implementación para comenzar a transitar la hoja de ruta a principios del año entrante.

Sobre la visión del plan llevado adelante por un equipo de 30 personas, se versa:

“Para 2030, Cuenca es una ciudad vibrante y sostenible mediante la adopción de la modalidad eléctrica con ciudadanos comprometidos con el cambio climático, donde la electromovilidad cubre eficientemente las necesidades de desplazamiento de la ciudad”.

Cabe recordar que este territorio cuenta con una de las mayores tasas de vehículos per cápita de Ecuador.

Los vehículos privados ocupan un 55% en la emisión de gases de efecto invernadero (GEI), cuando la media mundial es 45%.

El plan ecuatoriano se aleja de las metas establecidas al 2025 

Además de los planes locales, también existen herramientas nacionales para la implementación de políticas públicas hacia la electromovilidad, como lo son el Plan Nacional de Eficiencia Energética, la Ley Orgánica de Eficiencia Energética y otros incentivos tributarios y económicos.

Sin embargo, en materia de electrificación del transporte, los ojos están puestos en la Estrategia Nacional de Electromovilidad para Ecuador (ENEM). 

La misma indica objetivos en materia de movilidad eléctrica hacia el 2025, 2030 y 204, a través de los cuales se estipula alcanzar un total de 10.000 vehículos eléctricos en circulación divididos de la siguiente manera:

• 1500 buses eléctricos (del 3% al 5% del total del segmento).
• 2000 taxis eléctricos ( del 2% al 4%). 
• 1000 camiones ligeros de carga ( del 1% al 3%). 
• 5500 vehículos ligeros ( del 0,2% al 0,5%). 

En ese sentido, cabe señalar que el país cuenta con 1142 vehículos eléctricos. Esto significa que en tres años el parque vehicular electrificado debe sumar 8852 unidades. 

Al respecto de los segmentos señalados, existen proyectos locales que apuntan a la transición del transporte. 

Ejemplo de ello son las flotas de taxis y buses en Loja (50 taxis), Guayaquil (30 taxis – esperando sumar 70 más – y 20 buses eléctricos), Quito (con licitaciones en curso e análisis para la implementación de retrofit). 

En materia de vehículos particulares, aún las ventas de vehículos eléctricos no logran alcanzar el 0,2%.