Barbados es un líder activo en la agenda del cambio climático en el escenario mundial y, lo que es más importante, está poniendo en práctica lo que predica y comenzando a beneficiarse de los resultados de sus compromisos de crecimiento verde. El país se ha dedicado a impulsar su recuperación económica a través de un desarrollo inclusivo y sostenible.

En este contexto, acelerar las inversiones en electromovilidad ha demostrado ser clave para su caso de negocios.

El BID, a través de la Plataforma de Electromovilidad, está apoyando activamente a los países de América Latina y el Caribe. El Banco busca promover la transición a la movilidad eléctrica, vencer las barreras actuales y habilitar las oportunidades y beneficios que brinda la adopción tecnológica mediante la movilización de asistencia técnica e inversiones, con las que está acompañando 69 actividades en 20 países.

Barbados se está convirtiendo rápidamente en una historia de éxito para estas iniciativas.

Los autobuses eléctricos están conduciendo a Barbados hacia el ahorro y la sostenibilidad

En una reciente presentación ante el Parlamento, el Director General de la Junta de Transporte de Barbados informó que, desde 2020, el Gobierno de Barbados ha realizado inversiones por un total de US$22,5 millones para la adquisición de 49 buses eléctricos, dos de los cuales fueron cofinanciados por el BID y la Unión Europea a través del Programa de Energía Inteligente del Sector Público (PSSEP, por sus siglas en inglés).

Además, destacó que la nueva flota eléctrica y las instalaciones de carga han sido sinónimo de importantes ahorros en término de los costos de operación y mantenimiento de los buses.

La caída en los costos de mantenimiento de US$7,5 millones en 2019 a US$3 millones en 2021 recalca el valor agregado en esta inversión de capital, y estos ahorros mejoran aún más si se tiene en cuenta la reducción en los costos de combustible, que en 2020 representó US$4,1 millones y disminuyó a US$2,8 millones en 2021, al combinar los costos de diésel y electricidad.

También se pueden esperar ahorros adicionales en el futuro, considerando que las restricciones del COVID-19 en el número de pasajeros dieron como resultado que la Junta de Transporte usara autobuses diésel por más tiempo de lo previsto, ya que tenían una mayor capacidad de carga.

Según un estudio desarrollado por el Ministerio de Energía y Desarrollo Empresarial, los autobuses eléctricos actualmente en funcionamiento representan entre el 49 por ciento y el 70 por ciento de la flota disponible que presta servicio al transporte público en Barbados.

Además de contribuir a una vía de crecimiento de cero emisiones de carbono para el país, estos autobuses ofrecen una experiencia de transporte público más moderna y conveniente para los barbadenses con características como conectividad wifi, aire acondicionado, rampas de acceso para sillas de ruedas y puertos de carga USB.

Si todo sale según lo planeado, la Junta de Transporte adquirirá 10 autobuses eléctricos adicionales durante 2022, lo que aumentará la participación de vehículos eléctricos en el transporte público a alrededor del 85 por ciento de la flota en servicio. Por supuesto, aumentar el uso de vehículos eléctricos es una parte clave de esta transición.

A través de sus estrategias de transporte limpio, el Gobierno ha identificado su vulnerabilidad, pero también la necesidad de abordar su dependencia de los vehículos que generan mucho carbono. Desde abril de 2021, la política de contratación pública es priorizar la compra de vehículos eléctricos o híbridos, en la medida de lo posible.

Actualmente, la flota de vehículos propiedad del gobierno incluye 11 autos y camionetas eléctricas (o alrededor del 1% de la flota total del gobierno) y 39 autobuses eléctricos.

Promover el transporte verde más allá de la compra de vehículos eléctricos

La Junta de Transporte también está buscando formas de reducir su cuenta de electricidad y ecologizar su prestación de servicios mediante la instalación de sistemas solares fotovoltaicos, que no solo compensarán directamente los costos de electricidad, sino que también reducirán las emisiones de la flota, ya que la isla aún está sujeta a una matriz energética que depende en más del 95% de los combustibles fósiles.

Además, el Gobierno de Barbados ha avanzado en el desarrollo de políticas, estrategias y estudios para alcanzar su meta de neutralidad de carbono para el año 2030. Estos incluyen el Plan de Desarrollo Físico, el Plan de Movilidad Urbana Sostenible para el Área Metropolitana de Bridgetown y el Corredor Urbano, que han sido estrategias clave para establecer pautas para fomentar nuevas inversiones en electromovilidad.

Desde 2012, el Ministerio de Energía y Desarrollo Empresarial viene ejecutando actividades financiadas a través del PSSEP y, más recientemente, con la aprobación del Programa de Inversión en Energía Sostenible (Smart Fund II), en el que los vehículos públicos, el despliegue de infraestructura de carga y el desarrollo de políticas han comenzado establecer condiciones favorables para la electromovilidad en el país.

No obstante, aún se necesita un marco general sobre electromovilidad para lograr una transición que garantice medidas factibles de transporte bajo en carbono y resiliente, así como los cambios regulatorios, financieros y de comportamiento necesarios para un sistema de movilidad verde en Barbados.

Esto requerirá tomar en consideración directivas de renovación de flotas, sistemas de pago, despliegue de infraestructura de carga, planes de cambio, sistemas de seguimiento, gestión de residuos y demanda, carriles para bicicletas, aceras conectadas y medidas de accesibilidad, así como gestión de estacionamientos.

A medida que Barbados continúa buscando un enfoque holístico para la sostenibilidad y avanza en la integración de los compromisos climáticos establecidos en su NDC actualizada, mostrar los beneficios que han traído sus principales hitos ambientales ayuda a fortalecer su caso de negocios para continuar buscando el crecimiento verde.