Quienes conduzcan un coche con motor de combustión interna pueden estar seguros de encontrar una gasolinera en un radio de 50 kilómetros en cualquier momento.

Quienes quieran recorrer una distancia mayor con un coche eléctrico deben planificar meticulosamente antes del viaje cuándo y dónde van a cargar.

Roland Schüren también lo sabe. Es maestro panadero en Hilden, una ciudad de 55.000 habitantes en Renania del Norte-Westfalia. Hilden está situada entre Düsseldorf y Colonia, donde se cruzan las autopistas A3 y A46.

Este detalle es importante porque Schüren ha inaugurado la mayor estación de carga rápida para coches eléctricos de Europa. ¿Cómo se le ocurre a un panadero esta idea?

Todo comenzó con una carta al dueño de Tesla, Elon Musk. Hace ocho años, Schüren había reunido sus conocimientos de inglés y había escrito a Musk.

La ocasión: por aquel entonces, Schüren pasaba todos los días, de camino al trabajo, con su nuevo Opel Ampera por delante de un local comercial en venta.

Unos años más tarde, impartió una conferencia en una convención del sector de las tiendas de conveniencia.

Allí conoció a un directivo de la firma de automóviles eléctricos y le contó que ya tenía en funcionamiento el mayor parque de recarga público de Alemania frente a su panadería y que tenía grandes planes para la propiedad comercial vacía.

Aunque Tesla no entró como inversor, este encuentro fue el detonante para Schüren: incorporó a la empresa holandesa Fastned, un operador de estaciones de carga rápida donde se pueden cargar los coches según la norma de la UE.

Schüren abrió sus puertas en septiembre de 2020 con, inicialmente, 20 de las 40 estaciones de carga Tesla previstas y 8 de las 22 estaciones Fastned.

Independientemente de los 2 proveedores, el empresario está instalando él mismo 16 estaciones de recarga, y en perspectiva quiere explotar 52 estaciones.

Al final, se instalarán un total de 114 estaciones de recarga. ¿De dónde obtiene Schüren la electricidad?

La respuesta ilustra su motivación para trabajar por la sostenibilidad y la protección del clima.

Como panadero, trabaja en un oficio que consume mucha energía: tiene que calentar o enfriar constantemente los materiales.

«Un día me di cuenta de lo mucho que podía hacer en mi trabajo para tener un impacto positivo en el clima y el medio ambiente», explica Schüren.

Empezó a construir sistemas fotovoltaicos para generar electricidad él mismo.

En la fase final de construcción se añaden dos pequeños aerogeneradores. De este modo, puede producir él mismo toda la electricidad que necesita su panadería y la del parque de recarga rápida.

Como panadero con espíritu emprendedor, Schüren también tiene en cuenta lo que los conductores pueden hacer durante el tiempo de carga: comer, beber y trabajar. Quiere crear el sello Seed & Greet. Un restaurante que no solo sirve productos de panadería, sino también otros alimentos de alta calidad, segun informó Business Insider Alemania.

«No siempre tiene que ser un autocine o un restaurante de comida rápida», señala Schüren. Su objetivo es ofrecer delicias culinarias de tal manera que los conductores «prefieran hacer su parada en nuestra tienda».