Go Electric, la primera marca dominicana de vehículos eléctricos, amplía su catálogo de vans y unidades utilitarias que ofrece en el país con flamantes modelos que arribarán desde China en los próximos días. No obstante, la importación no ha sido tarea sencilla dado el contexto económico mundial actual. 

“La visión y meta que perseguimos con Go Electric es recibir vehículos mensualmente desde China”, asegura Manuel Gonzalez Abud, gerente de la empresa que comenzó sus operaciones a finales de 2019, momento previo a la pandemia de coronavirus, y también vicepresidente de la Asociación de Movilidad Eléctrica Dominicana (ASOMOEDO). 

De hecho, en un inicio, la compañía intentó viajar para conocer las unidades que traería al país. Sin embargo, esto no pudo ser posible y debió solicitar los modelos en base a la información obtenida a la distancia. Por fortuna, los vehículos no decepcionaron a la dirigencia y fue así que la firma continuó sumando nuevos a su cartera. 

Este fin de semana, arribarán las GOVAN XL y las GOPAX. Las primeras, de carga, cuentan con un motor de una potencia de 60 kilovatios (kW), un puerto de carga rápida, una velocidad máxima de 100 kilómetros por hora (km/h), una autonomía de 280 kilómetros y una batería de litio de 41,86 kilovatios hora (kWh). 

Las segundas tienen las mismas características, solo que es un vehículo destinado al traslado de pasajeros con sus 11 asientos. 

Por otra parte, la CARGO Van ha sido el vehículo más solicitado; mientras que la GO 5 EV, un modelo deluxe por su tecnología y diseño, es la más requerida por los hoteles de las zonas turísticas. 

Así como crecen los números de vehículos eléctricos en República Dominicana, donde ya circulan alrededor de 5300 unidades, lo hacen especialmente los modelos utilitarios que, gracias al aumento de servicio de última milla el último tiempo, ha logrado que el negocio continúe siendo rentable. 

Hoy, el número mayor de ventas (95%) tiene objetivo comercial, porque incluso la GO 01, más similar a una camioneta, es comprada para directivos de distintas empresas.

Y si bien el negocio no va a pérdida, para Gonzalez Abud el número de importaciones no es el buscado ya que, por el momento, se encuentran limitados.

«Tenemos que entender que estamos viviendo un momento anómalo. No hemos podido traer la cantidad de vehículos que queríamos para este año por el desastre que hay en China con el tema de los contenedores. Se nos ha trastocado el programa que teníamos para este año», cierra el empresario que, igualmente, ya tendrá despachos asegurados al menos hasta agosto.