Hace tres meses Felipe Ramírez Buitrago asumió como secretario de Movilidad de Bogotá tras su paso por la gerencia de Transmilenio. En el marco del ciclo Personalidades hace referencia a los desafíos que deberá enfrentar en su gestión para sostener el liderazgo en materia de movilidad limpia.

«Tenemos grandes desafíos en cuanto a la organización de los modelos de transporte y eso va de la mano de poder lograr las obras de infraestructura que permitan que tengamos esa nueva visión de una ciudad mucho más ordenada, más sostenible, que se mueve en los modelos peatonales de bicicleta y transporte público», indica.

Bogotá tiene unas metas muy claras en materia de movilidad eléctrica y transporte público que van en la misma línea que lo propuesto por el Gobierno nacional.

Al respecto, Ramírez afirma: «Las metas en movilidad eléctrica de Bogotá se pueden cumplir. Son ambiciosas, pero estamos encaminados, y como en todo proyecto necesita planificación».

Sin embargo, para poder alcanzar estas pautas, sostiene que lo más importante “es entender la cadena de la estructuración que se está buscando con el propósito de hallar oportunidades rentables». 

«Debemos saber quiénes son los que están dispuestos a participar del mercado de Colombia», refiere a Portal Movilidad.

En ese sentido, la clave es la financiación: «Debemos encontrar modelos de negocios que nos ayuden a tener costos de capital y costos asociados a intereses muchos más bajos con el fin de poder acceder a fondos que no necesariamente sean en el país sino internacionales».

Vale destacar que Bogotá recientemente lanzó un fondo para financiar la compra de camiones livianos cero emisiones. Es por eso que el secretario resalta: «El Gobierno necesita definitivamente poner de su parte».

Con esta herramienta financiera se pretende «reunir fabricantes, empresarios, pequeños propietarios, a los abastecedores de los distintos energéticos y que ayuden a dar pasos en la transición» en ese segmento.

De gerente general en Transmilenio a Secretario de Movilidad

Tras su reciente asunción, Felipe Ramírez Buitrago recuerda su paso por Transmilenio: «Me da muchísimo orgullo haber participado en la incorporación de los primeros buses eléctricos, su llegada y las posteriores estructuraciones en la ciudad hasta completar la adjudicación de la flota más grande de Latinoamérica«.

En tanto, resalta el esfuerzo de “un equipo maravilloso” donde han tenido la oportunidad de “llevar a la entidad a un momento vanguardista”. 

«Esa experiencia es fundamental para lo que se viene en la Secretaría en términos de camiones, taxis, y de seguir mejorando la flota de transporte público», menciona. 

Pero como en todos los trabajos está lo que más y menos gusta. “Poder servir a la gente es un privilegio que hay tiene que aprovechar”, señala destacando que tomar decisiones influyentes que impacten positivamente en la sociedad es algo que lo motiva.

Lo que menos agradable es el desgaste personal tanto físico como mental, esto debido a que es un trabajo exigente en términos de horarios y agenda muy compleja.