Adolfo Rojas de la Asociación de Emprendedores para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE Perú) planteó la falta de incentivos a los privados: “Dentro de la normativa vigente, hay que trabajar con suma urgencia la tarifa, y detallar los incentivos financieros y no financieros para que sean un driver en el sector”.

Asimismo, destacó la labor del Banco de Desarrollo de Perú (COFIDE) y consideró que liderará el financiamiento de infraestructura y vehículos eléctricos.

Por otra parte, representantes de las dos asociaciones argentinas presentes coincidieron en la necesidad de obtener financiamiento de organismos internacionales.

Luis Bertenasco, de la Asociación Argentina de Vehículos Eléctricos y Alternativos de Argentina (AAVEA), sostuvo que es clave para el desarrollo del transporte público.

Pero seña que en el sector privado es donde más movimiento se observa: “Específicamente en las categorías L6 y L7. Dos desarrollos locales que empezaron como prototipos ya fueron homologados, patentados y están en circulación. Están empezando a tener apoyo de bancos privados”.

En otro sentido subrayó: “Nos falta una ley de incentivo y promoción que debería abarcar el tema de las deudas que origina al Estado la inversión en infraestructura, incluso si pensamos en desarrollo de litio”.

Por su parte, Pablo Benveniste, responsable de Relaciones Gubernamentales de la Cámara Argentina de Vehículos Eléctricos y Alternativos (CAVEA), en su turno agregó: “Deberíamos tener herramientas en cuanto a beneficios impositivos, aduaneros y de circulación que al final resultan en beneficios económicos y comerciales”.

En el caso de Brasil, Ricardo Bovo de la Asociación Brasileña de Propietarios de Vehículos Eléctricos (ABRAVEI) mencionó que el gobierno no invierte en la compra de vehículos eléctrico, solo distribuidores, fabricantes y bancos, si el coche es eléctrico la tasa es más baja.

En cuanto a Chile, Andrés Barentin, presidente de la Asociación Gremial de Vehículos Eléctricos de Chile (AVEC), indicó que el modelo de negocios desarrollado para financiar la incorporación de flotas en el transporte público está bien encaminado. En cambio, consideró que falta apoyo para las flotas de empresas más pequeñas.

A su momento, Alberto Escobar, secretario general de la Agrupación Movilidad Eléctrica de Chile (AMECH), destacó la importancia de invertir en capacitación hacia los conductores para obtener mejores rendimientos de las unidades eléctricas.

Diana Rivera, directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica (ASOMOVE), analizó el caso de Costa Rica: “El beneficio para financiar un eléctrico es menor, no solamente para carros, se enfrenta a lo mismo en el transporte público. Faltan esquemas de financiamiento para agilizar el traspaso”.

En el caso de República Dominicana, Charles Sánchez de la Asociación de Movilidad Eléctrica Dominicana (ASOMOEDO) comentó que se solicitó la quita de los impuestos por un periodo de tres años para todos los vehículos eléctricos. También resaltó que está muy esperanzado por la asunción del nuevo gobierno.

Desde México, Mark Sánchez, presidente de la Asociación Nacional de Vehículos Eléctricos y Sustentables (ANVES), sugirió a las conversiones como un segmento importante en la creación de empleos y en la masificación de la tecnología en empresas de logística y autobuses.

Por su parte, Juan Carlos Botrán de la Asociación de Movilidad Eléctrica de Guatemala (AMEGUA) opinó: “Como los grandes fabricantes todavía no nos ven como un player importante, es una oportunidad muy importante para promover las industrias locales y el comercio entre países de Latinoamérica”.

Invitamos a ver el video completo para conocer las opiniones de los referentes sobre el resto de los ejes temáticos de «Mobility Ping Pong»: