Con una mayoría simple, se aprobaron este lunes en lo general y lo particular los artículos no reservados de la Reforma a la Ley Minera del presidente Andrés Manuel López Obrador que promueve la soberanía de México ante el litio.

La visión del mandatario respecto a este mineral tiene en la cúspide a la famosa transición energética y, por consiguiente, al futuro encontrado en la movilidad eléctrica. 

«Nos reservamos la posibilidad de meter el litio en la Ley Minera, porque es un mineral estratégico para el desarrollo futuro, para desplazar el petróleo: no se va a poder modernizar la industria sin el litio», aseguró AMLO. 

En ese sentido, el Ejecutivo propone crear una empresa como la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE), es decir, un organismo autónomo descentralizado pero especializado en litio.

Cabe recordar que en las sierras del centro del país y el noroeste desértico del territorio mexicano hay 1,7 millones de toneladas de reservas mineras de litio estimadas, que colocan a México entre los 10 países con mayores reservas. 

Entonces, ¿cuál es el potencial del país como fabricante de baterías para vehículos eléctricos?

En diálogo con Portal Movilidad, José Celis, consultor especialista en energía y director de Mitiga CO2, afirma que, si bien los yacimientos pueden abastecer a la industria automotriz, la realidad es que en el territorio el mineral no es tan fácil de procesar como sucede en otros países de la región. 

“Lo que tenemos en México puede servir para baterías, pero hay que procesar el mineral con ácidos porque en este caso se trata de un derivado de sulfato. A diferencia de lo que sucede en Chile o Bolivia, cuya sal es más fácil de procesar y, en consecuencia, los costos son menores”, advierte el experto.

Y agrega: “Además, la industria todavía no está tan desarrollada. Entonces, por el momento, el costo beneficio no es positivo para la nación”. 

De hecho, Celis asegura que ya hay concesiones a empresas para explotar litio en varias partes del país. Sin embargo, estas se han enfrentado a este tema técnico, a partir del cual la calidad de la piedra requiere de un proceso más exhaustivo para separar el sustrato necesario que necesitan las baterías. 

“Varias de estas compañías han buscado capitalizar sus proyectos con patrocinio para ver cómo hacerlos viables”, asegura. 

Por su parte, en el debate, los partidos de la oposición afirman que la propiedad del Estado mexicano sobre el subsuelo, como los yacimientos minerales, ya está protegida en la Constitución y el desarrollo de la explotación del litio recién está dando sus primeros pasos.

Entretanto, Morena sumó el respaldo de sus aliados Movimiento Ciudadano, Partido del Trabajo (PT) y el Verde Ecologista de México (PVEM) para declarar al litio como «un mineral estratégico en el desarrollo industrial y tecnológico».

De tal modo que con una votación de 298 manifestaciones a favor, 197 abstenciones y cero en contra, el Estado mexicano tendrá las facultades únicas de exploración, explotación, industrialización y el aprovechamiento integral del litio. 

Ahora, la Cámara de Diputados discutirá los artículos reservados, para después ser enviada al Senado de la República para ratificar dicha iniciativa con proyecto de decreto.