En una nota de prensa, la Consellera de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática ha indicado que el Plan incluye 71 medidas, diferenciadas en diez líneas de actuación y cinco bloques, según informó el medio español 20 Minutos.

El vicepresidente del Govern y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, ha indicado que Palma tiene que apostar por ser un referente en el Mediterráneo.

«Con este Plan puede conseguir hacer una ciudad más saludable y sostenible con pasos que ya se han realizado, como la reducción de la velocidad o los carriles bici», ha dicho.

Por su parte, el alcalde de Palma, José Hila, ha subrayado que desde el Ayuntamiento se ha apostado por la sostenibilidad porque se debe combatir el cambio climático.

«Esto implica impulsar medidas y actuaciones que nos ayuden a construir una ciudad más verde, de ahí la importancia de tener Planes de Calidad del Aire, porque queremos seguir avanzando en una Palma más saludable», ha afirmado.

A continuación, el director general de Energía y Cambio Climático, Pep Malagrava, ha manifestado que a pesar de que estar en una buena situación de calidad del aire, «no nos tenemos que conformar y tenemos que trabajar por la excelencia, puesto que es una cuestión de salud pública».

El Plan de mejora de la calidad del aire de Palma está dividido en cinco bloques. El primero está centrado en la movilidad terrestre e incluye medidas como la de mejorar el servicio y la oferta del transporte público existente en Palma para fomentar el uso entre los usuarios de vehículo privado o el hecho de gestionar de forma adecuada la movilidad en grandes centros de trabajo.

Además, sugiere crear aparcamientos seguros y con cargadores eléctricos cerca de las estaciones de transporte público, fomentar la sustitución de vehículos por aquellos que funcionen con combustibles con menos emisiones o cero emisiones, optimizar y crear aparcamientos disuasorios para fomentar el transporte público y controlar y limitar la velocidad más estrictamente.

Por otro lado, se establece dentro de las medidas la creación de una zona de bajas emisiones, así como vigilar las nuevas velocidades a las calles de la ciudad y fomentar el uso de coche compartido, o aumentar los espacios exclusivos para transporte público y peatones en detrimento de los espacios actuales destinados a vehículos privados.

También es imprescindible velar por el uso correcto de los nuevos vehículos de movilidad personal, mejorar y aumentar el espacio para ciclistas, optimizar la intermobilidad en bicicleta y transporte público, así como mejorar y aumentar el espacio para peatones.

El segundo bloque está centrado en la eficiencia energética. Plantea medidas destinadas a reducir emisiones industriales, de obra, otras fuentes fijas y de la distribución de mercancías; medidas destinadas al sector de viviendas y al sector terciario, así como medidas destinadas a reducir las emisiones de la acción municipal e institucional.

En este sentido, se trata de velar por la instalación de energía solar fotovoltaica en grandes cubiertas y cumplir la obligatoriedad de hacer un cálculo anual de huella de carbono y un plan de reducción de emisiones por parte de grandes y medianas empresas.

Además, se establece la optimización de los servicios DUM para fomentar la movilidad sostenible y el uso de energías renovables, así como informar y asesorar del uso de las energías renovables, además de limitar la dispersión por el territorio de viviendas, equipamientos y servicios y fomentar el comercio de proximidad.

También se establece la sustitución de los medios de transporte gestionados por la Administración por otros de bajas emisiones o cero emisiones, la ejecución del Plan Local de Prevención de Residuos Municipales aprobado en julio de 2019, y la promoción de la economía circular del compostaje.

En lo que se refiere al tercer bloque, tiene relación con el seguimiento y la reducción de emisiones en episodios de alta contaminación: presenta medidas destinadas a la información y el seguimiento de la calidad del aire, además de la reducción de emisiones en episodios de alta contaminación.

En cuanto al bloque cuarto, hace referencia a otros tipos de medidas, mientras que el bloque quinto está centrado en la movilidad aeroportuaria y aporta medidas destinadas a reducir las emisiones al puerto, así como medidas destinadas a reducir emisiones en los aeropuertos.

Las medidas propuestas para Palma se centran en redactar el Plan de Mejora de la Calidad del Aire (PMCA) del Puerto y del Aeropuerto de Palma, así como un Plan de Mejora Sostenible (PMS) de las dos infraestructuras. Además, se propone una ambientalización de la flota terrestre y del equipamiento, así como la optimización de la movilidad de los aviones dentro de la pista.