Aprovechando los días de verano que aún quedan, Joaquín González García organizó una escapada familiar a un pequeño pueblo ubicado en la provincia de Soria.

Con un recorrido por delante de 210 km desde Madrid, partieron sin ningún problema. Montaron su BMWiX y salieron a la ruta a una media de 120 km/h y con un consumo aproximado de  21Kw cada 100 km.

Dicho modelo es un SUV 100% eléctrico -con tintes de monovolumen-, del segmento E, fabricado por BMW desde 2021. Tiene un tamaño similar al de los X5 y X6 y una autonomía eléctrica que puede alcanzar hasta 600 kilómetros con una sola carga.

“Decir que estos coches no valen para viajar es no haber probado uno”, reconoce el Gerente Caetano Cuzco Concesionario Oficial BMW, MINI y BMW Motorrad en su posteo en LinkedIn.

Pero, explica: “El problema llegó a la hora de ver cómo cargar el coche para poder volvernos, aunque lo cierto es que debí hacer caso al navegador del coche y hacer una parada intermedia”.

Advertido por estas señales, llegó a destino y comenzó a hacer preguntas, que para su mala suerte, no fueron respondidas con positivas. 

Al buscar un conector para completar la recarga de su batería y emprender la vuelta, se dio cuenta de que en ningún sitio “en la Soria profunda”, contaba con un punto de carga con el cual pueda abastecerse.

Entre sus posibilidades esperaba dar con al menos un cargador con una potencia de 2,1Kw/h, lo que requeriría al menos unas 24/36 horas, lo que le permitiría recorrer el lugar y luego emprender la vuelta a su ciudad de origen.

Sin una buena red de 5G o 4G disponible, se encontró con que su búsqueda era en vano, y tuvo que recurrir a un plan de emergencia.

“Llevamos el coche a cargador más cercano (30 km – Burgo de Osma), acompañados obviamente de un coche de combustión para poder volvernos y a la mañana siguiente me he hecho 70 km en bici para ir a recogerlo”, relata Joaquín González García.

Pese a los altercados, el gerente del concesionario se toma las cosas con humor y sabe reconocer lo bueno de la experiencia: “Fue una excusa para hacer deporte, pero lo malo es que no todo el mundo está dispuesto a desplegar tal operativo para, simple y llanamente, cargar un coche”.

Como resumen, no deja de reconocer las prestaciones que brinda su vehículo, ya que según sus propias palabras posee una “tecnología espectacular, con 370 km autonomía al 100% con mi “estilo” de conducción”.

Pero pone sobre la mesa la realidad que hoy acontece a España: la infraestructura de recarga todavía no está lista en algunas zonas del país y permite un uso limitado para este tipo de experiencias.

Dicho esto, cita a los autores de uno de los más recientes debates que se dio en la red social profesional: Alberto Olivera, CEO de Smart, y Gerardo Pérez Giménez, Presidente de Faconauto. Esto, para darles la razón a ambos.

Por el lado del representante de los vehículos electrificados, destaca las prestaciones que dan estos segmentos e invita a probarlos.

Pero dando respaldo a los argumentos de Pérez de Giménez, advierte que “implantar el modelo a nivel local a día de hoy es una utopía”.

“El futuro no es eléctrico, tampoco es combustión; el futuro es un mix optimizado para cada uso, y usuario, de todas las tecnologías actuales y en desarrollo; el futuro es #thePOWERofCHOICE, los coches son espectaculares, pero una vez más es el Estado el que lo estropea”, asegura al pie de su posteo el gerente del concesionario.