La disparidad más notoria entre ambos planes es su presupuesto, para la segunda versión se estipuló una cifra de 100 millones de euros. Sin embargo, se estimaron 20 millones más que fueron repartidos entre las Comunidades Autónomas donde las ayudas se agotaron antes del fin del plazo.

En el caso del Plan Moves III la dotación es mucho más elevada. De principio, el Gobierno ha reservado una partida de 400 millones de euros, pero con el compromiso de aumentarla hasta un máximo de 800 millones de euros si hay suficiente demanda

El Moves II tenía cuatro actuaciones: adquisición de vehículo, instalación de puntos de recarga, implantación sistema de alquiler de bicicletas eléctricas y planes de movilidad para empresas. Sin embargo, la tercera versión del plan solo se enfoca en la compra y la recarga.

Sobre los vehículos subvencionados, la tercera edición dejó fuera a camiones y autobuses eléctricos y los vehículos de gas, a diferencia de la segunda.

Sobre el tiempo de vigencia de las ayudas, el Moves II se estipuló con un máximo de 12 meses desde su entrada en vigor.

En el caso de la versión III, esta entró en vigor el pasado 10 de abril y las ayudas se repartirán a lo largo de los próximos años, hasta 2023.

En ambas ediciones, son las Comunidades Autónomas las encargadas de gestionar las solicitudes y repartir las ayudas. Por el momento, faltan por activar las ayudas Cantabria, Cataluña, Extremadura, La Rioja y la Ciudad Autónoma de Melilla.

Sobre las cuantías de ayudas, estas son más altas en la tercera versión del plan (7 mil euros), mientras que en el segundo podía llegarse hasta 5.500 euros.

Eso sí, en ambos casos para llegar a ese máximo es necesario achatarrar un vehículo antiguo.

El Moves III cuenta con un adicional del 10% en tres casos, uno para autónomos que utilicen el vehículo eléctrico como herramienta de trabajo, otro para titulares empadronados en municipios con menos de 5.000 habitantes y el último para personas con discapacidad.