En el marco del ciclo de entrevistas “Personalidades”, organizado por Portal Movilidad, Javier Martínez Ríos, director Movilidad Sostenible en EDP Energía,  explicó cómo debe planificarse la instalación de un punto de recarga para poder aprovechar al máximo su potencial.

En este sentido, llamó a que se piense como primer punto: ¿Cuáles son los lugares donde los coches pasan más tiempo parados?

Estos pueden ser parking de las empresas, de los centros comerciales, los hipermercados, en los colegios, los gimnasios, restaurantes. Todos son lugares en que ese tiempo en el que el usuario está allí, es ideal para que los coches se estén recargando.

“Todos los establecimientos son una posibilidad, pero para el mismo esto también es una oportunidad de dar nuevos servicios a sus clientes”, destacó el especialista.

De esta manera, desde la empresa sostienen la idea de que siempre que el coche esté parado, se esté recargando.

Fue así que EDP planificó el despliegue de su red pública de más de 300 cargadores distribuidos por toda España, la cual está en miras de seguir expandiéndose de cara a los cambios que se verán el próximo año en cuanto a demanda.

Trabajando sobre un sector que se encuentra en constante crecimiento, los ánimos están en acoplar los planes a esa perspectiva.

Ante esto, aseguraron que se prevé ver “entre 2024 y 2025 que la aceleración eléctrica será prácticamente obligatoria”.

Mayor velocidad en los trámites 

El crecimiento de la demanda ha puesto al sector frente al problema que requiere instalar nuevos cargadores en la vía pública: los tiempos de habilitación de los puntos de recarga. 

Ante esta situación, Javier Martínez Ríos propuso dos caminos: “Podemos criticar lo que pasa porque es suficientemente lento y porque hace falta un papel mucho más activo de la administración, pero también podemos resaltar que las cosas se están haciendo y todos estamos buscando las mejores maneras de hacerlo” .

En su intervención no justificó los tiempos de demora que se han estado viendo, que van desde los 12 a los 24 meses, sino que explicó que esto se debe a que las eléctricas buscan una velocidad de despliegue mucho mayor a la que incluso la propia regulación puede tener.

“De un momento a otro comenzamos a tener una cosa que antes no teníamos, y ello es que hay una demanda creciente y constante”, subrayó el directivo de EDP.

Es una realidad que la iniciativa privada va más rápido que la estatal, pero para mejorar esta situación se necesita “más coordinación y velocidad”, las cuales permitirán ir solucionando estos conflictos.