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jueves 01 de julio de 2021
Cómo el avance del vehículo eléctrico cambiará el rol de la posventa para 2030 en España
Un nuevo estudio de Ganvam y Roland Berger destaca que la gestión del dato será el valor diferencial del mercado a futuro.
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De acuerdo a un nuevo estudio de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) en colaboración con Roland Berger, la creciente electrificación del parque vehicular cambiará el rol de la posventa en España.

El dato se desprende de un análisis en vistas a 2030, año para el cual la asociación prevé que la implantación de este tipo de vehículos será mayor, lo que reducirá los pasos por el taller. El riesgo para estos puede implicar una pérdida potencial de ingresos de hasta el 27%.

En ese sentido, Ganvam destaca que la gestión del dato será el factor clave para “reconvertir la posventa en un departamento de fidelización”.

Esto se suma a que la venta de vehículos particulares dejará de ser la principal modalidad –el 67% se destinará a servicios de movilidad por suscripción–, lo que también implicará una reacomodación del sector.

“El dato se convertirá en uno de los mayores activos para no quedar apartados en los servicios para los clientes”, destaca Jaime Barea, Director Corporativo de Ganvam.

En ese sentido, se definen tres tipos de datos:

  • Los tecnológicos fijos (consumo de combustible, kilometraje, potencia del motor, presión de los neumáticos, número de serie)
  • Los tecnológicos dinámicos (navegación, aparcamiento, geolocalización, peajes, hora de uso de iluminación del vehículo)
  • Los personales (perfil de movimiento, comportamiento del conductor, hábitos y preferencias de entretenimiento, número de veces que se abrocha el cinturón de seguridad, nombre de usuario y correo electrónico)

Por otra parte, Cristóbal Colón, de Roland Berger, subraya la capacidad de los nuevos vehículos eléctricos para generar datos de manera constante.

“Pienso en un Tesla: tiene las cámaras activas todo el tiempo y lo que hace es aprender del entorno, de los conductores, los peatones, los ciclistas, y eso permite generar una base de valor”, define.

Sin embargo, esto no solo abrirá nuevas opciones para la posventa sino también para los organismos públicos. Un ejemplo es cómo se podrá contar con información constantemente actualizada para el mantenimiento de carreteras.

El experto no duda en destacar el dato como “el negocio del futuro”, lo que se puede utilizar como servicio.

“La posventa deberá generar nuevas líneas de negocio para no quedar afuera de la competencia con otros operadores, que pueden ser o no de la automoción”, complementa Barea.

El rol del coche autónomo

El estudio también contempla la llegada del coche autónomo, lo que podría neutralizar “por completo” la siniestralidad y también decrecer la necesidad del taller. Sin embargo, los datos señalan que para 2030 solo el 3% del parque será autónomo aunque Ganvam lo ve como una tendencia “imparable” que deberá ser también contemplada en la posventa.

“Cuando llegue plenamente, provocará que caiga esta actividad y por tanto su contribución al beneficio de las empresas”, explica Barea.

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