
Resuenan en toda América Latina los resultados alcanzados por la experiencia de buses eléctricos en Santiago. La última repercusión de esta semana fue –ni más ni menos- por parte del Grupo Banco Mundial.
“Los buses eléctricos han demostrado ser más competitivos que los buses diésel Euro VI, en la experiencia operacional de Red Metropolitana en el sistema Red”, comenta a Portal Movilidad Bianca Bianchi, especialista senior en Transporte Urbano del Banco Mundial.
Y sostiene que «la flota -que actualmente supera las 750 unidades y representa alrededor del 10% del parque total de buses- ha confirmado ser técnicamente competitiva, pues tiene menores costos de mantenimiento y eficiencia neta en el consumo de energía»
¿Cuáles son los argumentos sobre los que la entidad internacional sitúa la competitividad de la tecnología eléctrica por sobre la diésel?
Por un lado, el Banco Mundial destaca el modelo de negocio utilizado para la implementación de los e-buses en Santiago que consiste en una asociación público-privada (PPP) entre el Estado y las empresas privadas.
A partir de allí, tras varios pilotos de e-buses en las calles de Santiago y el desarrollo de estudios asociados sobre la electromovilidad en la ciudad, el operador de buses Metbus fue el primero en incluir los buses eléctricos en su flota.
Al día de hoy, el operador cuenta con 436 unidades BYD, seguido por STP con 240 buses (215 Foton y 25 Yutong), continúa Buses Vule con 76 vehículos Yutong y finalmente RedBus cuenta con 25 e-bus King Long. La suma total representa el 10% de la flota actual del servicio de transporte urbano de pasajeros.
Pero en el análisis de competitividad se refleja que en la primera incorporación, por el precio del bus eléctrico, se realizó una inversión de más del doble que la que se hubiese hecho por un bus diésel. Aquella vez los buses BYD costaron alrededor de US$450.000.
“Estos costos cambiaron significativamente con la incorporación de una mayor flota de e-buses; obteniendo precios mucho más bajos, ya que los fabricantes de buses BYD y Yutong vieron a Chile, como la oportunidad de introducir la tecnología de los e-buses en el mercado latinoamericano», asegura el reporte del Banco Mundial.
Y señala que «esta vez, el precio del e-bus fue de alrededor de US$300.000, lo que lo hace mucho más competitivo en relación con los buses diésel Euro VI”.
Técnicamente, Grupo Banco Mundial reflejó el siguiente cuadro estadístico, del que podemos dilucidar la competitividad a largo plazo de un bus eléctrico sobre un diésel de igual dimensiones de chasis.
Si bien el precio del vehículo no es del doble como en un primer momento, sigue siendo más elevada la inversión inicial en la tecnología eléctrica, con una diferencia de mínimo cien mil dólares.
En lo que refiere a performance, el bus diésel permite el recorrido de 2 kilómetros por litro. Si analizamos en unidades, para la parte eléctrica referimos en kWh y existe una relación de alrededor de un kilómetro por kWh. A percepción inicial, las dos primeras líneas del cuadro, el diésel no resulta una mala opción.
Hasta acá la diferencia radica en la cantidad de emisiones de cada vehículo: polución asegurada para los diésel, cero emisión para los eléctricos.
Sin embargo, la diferencia que hace a la competitividad de la tecnología eléctrica se marca en los últimos dos aspectos. De los cuales, se sabe que se verán reflejados en función de un largo plazo de operación de la flota.
Por un lado el costo de operación de un bus diésel requiere de $0,42 de dólar por kilómetro, mientras uno eléctrico demanda de $0,10 de dólar por kilómetro. Es una clara diferencia en la que se refleja que la energía eléctrica cuesta sólo un cuarto del valor del combustible fósil.
Diferencias importantes se encuentran también en el costo de operación. Para el caso del diésel implica $0,27 de dólar por kilómetro. En cambio para el eléctrico significa menos de la tercera parte, solo $0,08 de dólar por kilómetro.

Bianca Bianchi, especialista senior en Transporte Urbano del Banco Mundial.
Entonces observamos que para un bus diésel de un costo de alrededor de $200 mil dólares, se requerirá un gasto de $0,69 dólares por kilómetro y para uno eléctrico de alrededor de $300 mil dólares se incurrirá en un gasto de $0,18 de dólar por kilómetro.
Esta diferencia de más de un tercio es la que marca la competitividad de la energía eléctrica por sobre la diésel teniendo en cuenta que en un mediano y largo plazo la inversión se recupera.
En función del análisis y sus resultados, Bianca Bianchi considera: “Es necesario que los países cuenten con sistemas de Transporte Público modernos, que promuevan la introducción buses eléctricos y exijan al resto de la flota, las más exigentes normas de emisión»
Y concluye que «este compromiso con la sustentabilidad, permite acceder además a mejores fuentes de financiamiento, las cuales consideran como atributo valorable la reducción de emisiones y el compromiso con la calidad de vida de las personas.”
Hay que considerar que un Ebus, nunca se Chatarriza, porque las baterías van a segunda vida, y finalizada la degustación, los minerales que se recuperan van a uso industrial, como también el Cobre y Neodimio que se recupera del motor . Son valores residuales muy importantes que no se consideran en las evaluaciones que se hacen con respecto a los buses tradicionales…Además las cero emisiones no se consideran como ventajas sobre los de combustión.
Gracias a Marianella por el reportaje…muy profesional y con impacto económico directo al meollo del asunto…. felicitaciones…. gracias a Francisco por agregar semejantes datos tecnológicos a la nota periodística de Marianella….ambos se complementan con acertadísimas realidades…
Adicionalmente cuenta con un mejor cuidado del medio ambiente, menos contaminación sonica y de gases, dos super ventajas en grandes ciudades, que con los años habría ahorro en salud ambiental y de la población, ojalá llegarán los autos eléctricos más rápido a América latina, ya los autobuses es un excelente comienzo para Santiago. Felicitaciones.
La crítica que hago es: no puede ser que el mayor productor de materia prima, para las *baterias* tenga que pagar los precios más caros, por obtener buses que están como los pioneros. El gobierno de turno es un ente derrochador de los recursos del
erario Nacional comprometidos, amparando con estos recursos a los empresarios que siguen violando DD HH de los Conductores de las flotas de estas empresas, que aún no tienen baños, para sus necesidades básicas, fisiológicas, ejemplo: causa T – 86 – 2010 del 2° Juzgado Laboral de Santiago, es una de las tantas Tutelas laborales que individualiza y se pueden demostrar.
Se me censuró mi comentario que realice, por decir la verdad, o solo se debe hablar de la ideología de la publicación.
Encuentro excelente, nos muestra los indicadores diferenciales de los buses Disel Euro6 y Electricos .
Cada vez más se muestra la diferencia de los costos a largo plazo.Gracias por este tipo de información.
Existen beneficios adicionales para el e- Bus que no se reflejan en el documento, como las tecnologías de motores síncronos directos a ruedas, que proporcionan mayor potencia- torque y disminuyen el espacio de tren motriz, aumentando la capacidad del bus, su autonomía de ruta y requiriendo menos espacio de baterías. El avance en e-Buses se mide día a día!
Es importante incluir el análisis respecto a la vida útil? Las baterías están entre 7 y 10 años? El bus Euro VI puede estar entre 12 y 15? Ya see ha descartado una nueva inversión en el e-bus