Los números del reporte de electromovilidad de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) demuestran que se repite la tendencia que se dio en enero en la que las instalaciones de puntos privados superaron ampliamente a los puntos de carga públicos.

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Ocho fueron los cargadores de acceso público que se sumaron a la red de carga del país durante febrero, mientras que el año lleva un total de 60 instalaciones privadas (33 en enero y 27 en febrero) que suman 83 cargadores en 2023. Además se incorporaron 90 puntos en centros de carga para transporte público y otros 22 en electroterminales.

¿A qué se debe esta diferencia?

Fuentes de la SEC le indicaron a Portal Movilidad: «Uno de los grandes cambios de paradigma que conlleva la electromovilidad es la posibilidad de que los vehículos se recarguen energéticamente en los lugares donde habitualmente se encuentran estacionados”.

Entonces, con este argumento, para la SEC los usuarios domiciliarios, de países que llevan la delantera en electromovilidad, recargan en promedio el 80% de las veces sus vehículos eléctricos en sus hogares, y el resto lo realizan en instalaciones de recarga públicas.

Lo anterior, demuestra que la carga pública se desarrolla más bien en un concepto de oportunidad, lo que implica estar ubicada en lugares estratégicos, que es por donde se mueven los usuarios, los que, por necesidad de recorrer largas distancias, deben recargar electricidad en carreteras o autopistas.

“Asimismo, otro punto que hemos visto en la fiscalización SEC de las instalaciones de electromovilidad es que los mismos comercializadores de vehículos, cuando cierran la venta de alguna flota de electromovilidad o unidad, incluyen la posibilidad de instalar un cargador propio o terminal, para dichos clientes. Esto implica que a medida que crece el parque de vehículos también crece la carga privada”, explicaron los autores del reporte.

Desde Copec Voltex, Andrea Castro, gerente general de la firma indica: “En Chile, actualmente existen más de 600 puntos de carga de acceso público, lo que evidencia un avance significativo en el desarrollo de la infraestructura de carga eléctrica, considerando el actual parque vehicular eléctrico, ya que prácticamente se trata de un punto de carga público cada cuatro autos eléctricos. Este escenario es positivo en comparación con el de otros países de mayor desarrollo, ya que garantiza la movilidad de estos vehículos en gran parte del territorio”.

Y agrega: “En paralelo, hay un incremento de los puntos de carga privados, lo cual es bastante lógico al estar asociado a la venta de vehículos eléctricos y el desarrollo de infraestructura de carga base, ya sea a nivel residencial, comercial o industrial”.

Andrea Castro menciona que frente a ese escenario, Copec Voltex busca fortalecer la infraestructura de carga eléctrica a lo largo de todo el país de forma integral, es decir, en diversos espacios paralelamente; así, seguir expandiendo los beneficios de la electromovilidad cada día a más personas.

“Estamos impulsado el desarrollo de espacios de carga pública, con la meta de alcanzar más de 100 puntos de la Región Metropolitana y cubrir las 52 comunas que la componen. En 2023, estamos avanzando en incorporar nueva infraestructura de carga rápida, esperamos que sean, al menos, 30 puntos adicionales en nuestras estaciones de servicio».

Luego, añade: «Además, desarrollamos alianzas junto a marcas de automóviles para reforzar las redes y brindar apoyo de carga a vehículos particulares, sumado a la implementación de electroterminales para el transporte público, así como también en infraestructura de carga enfocado en el retail y la minería”.

Por su parte, Eduardo Quezada Araya, gerente comercial de KPN Energy Solutions, opina que el crecimiento de la instalación de puntos de carga privados es mucho más rápido basado en dos cosas.

La primera, por voluntades y el aporte del mundo privado de la venta de vehículos eléctricos que está entregando facilidades a los usuarios que compran un auto en el poder instalar un cargador en su casa dentro del valor del vehículo, con subsidios o asociaciones con otras empresas para instalar en un precio referencial estos cargadores.

“Efectivamente, casi por cada auto se está instalando un cargador y los números de crecimiento del parque vehicular eléctrico son asombrosos en este año”, afirma Quezada.

El segundo punto al que hace alusión es que la experiencia de carga para el usuario es sumamente importante. Si se analiza la relación de tener un cargador en la casa con la posibilidad de configurar y con una tarifa rebajada, es mucho mejor que la experiencia que se está viviendo en cargadores públicos que hoy están repletos de vehículos de última milla o de pasajeros.

Sobre la carga pública menciona: “Existen bastantes trabas desde lo técnico para poder instalar cargadores públicos: ver la coordinación con las autoridades locales, la alimentación y desde dónde se va a extraer la energía, los puntos estratégicos, etcétera. Más que un retraso, son más las trabas que las ventajas y como el mercado es dinámico avanza desde donde se entregan más facilidades, en este caso lo privado”.

En tanto, Pablo Maturana, CEO de Evsy, sostiene que el mayor factor de este fenómeno es la etapa del mercado en la que se encuentra el país. Los compradores de autos eléctricos no quieren depender de la carga pública para adquirir un vehículo porque genera mucha incertidumbre.

“Entonces, ¿qué sucede? Como hemos visto, ha aumentado la oferta de vehículos y también la venta de estos, y los compradores son principalmente personas que viven en casas, quienes pueden instalar su propio cargador particular. En conclusión: la instalación de puntos de carga privados crece casi a la misma velocidad que la venta de autos eléctricos particulares y, como no hay muchos puntos públicos, la solución más rápida es seguir instalando privados”, refiere.

Con respecto a los puntos públicos, Maturana coincide en que estos tienen un costo mucho más alto y, por lo tanto, el retorno de la inversión es mucho más lento para las empresas que deciden instalar y necesitan monetizar la inversión (sobre todo porque en general es carga rápida).

“Además, la instalación requiere negociaciones, hay menos control por parte del CPO y necesitan mantención frecuente dada la intensidad del uso, que es utilizado generalmente por quienes no pueden cargar en casa, recorren muchos kilómetros al día o van de viaje, básicamente una porción mucho más reducida del mercado”, explica.

El reporte de la SEC está disponible en este link. Será análisis para el mes que viene revisar si el mercado se sigue comportando de la misma manera.