Ante las críticas por parte de las empresas transportistas sobre irregularidades e inconsistencias en el concurso de asignación de rutas y frecuencias de Quito, la Secretaría de Movilidad de la ciudad aseguró que las condiciones del pliego no buscaron perjudicar las economías de las operadoras y, además, adelantó incentivos para los buses eléctricos. 

Cabe recordar que el pasado jueves, la autoridad recibió seis ofertas para diez de los 16 paquetes de ruta de la licitación que tiene entre sus requisitos la incorporación de esta tecnología. No obstante, más del 68% de las empresas solicitaron la nulidad del concurso alegando, entre otros puntos, el déficit financiero que significa sumar las unidades eléctricas a sus flotas en los términos acordados. 

Secretario de Movilidad de Quito, Guillermo Abad Zamora

Por su parte, el secretario de Movilidad, Guillermo Abad Zamora, explica en base a los reproches del sector: “Considero que los argumentos que se presentaron se diluyen cuando tienes un 65% de aceptación en el proceso. Yo hubiese entendido esas observaciones que tiene el sector si teníamos quizás un 20% de zonas ofertadas, pero no fue así”. 

Y agrega: “Esto quiere decir que las otras operadoras entendieron el mensaje de la Secretaría donde se explicó claramente que el equilibrio financiero del sistema está garantizado a través de los subsidios y formas que tiene la ordenanza”. 

En ese sentido, el Secretario adelanta que actualmente la Comisión de Movilidad trabaja en una ordenanza de electromovilidad para incentivar la incorporación de estos vehículos y “darles mayores garantías a los operadores para la inversión”. 

“Hay que aclarar también que el pago por kilómetro y servicio además incluye el tipo de inversión. Es decir, los vehículos que son eléctricos van a tener un mejor pago que los vehículos que son a combustión”, enuncia. 

A su vez, Abad manifiesta que los costos serán menores teniendo en cuenta que la energía eléctrica provendrá de la empresa de agua potable de la ciudad que cuenta con una planta de generación eléctrica, la cual suministrará al trolebús, al Metro y a las electrolineras.

“Todos los sistemas de transporte tienen un subsidio que mantienen el equilibrio financiero. Algunos operadores alegaban que ciertas zonas tienen rutas deficitarias, lo cual es verdad, pero también hay rutas de superávit. Es ahí cuando se generan compensaciones cruzadas”, declara.

“Esto creo que quizás no se entendió y esperemos que, ahora con las debidas garantías que hemos dado, en la segunda fase del concurso se presenten”, menciona respecto a la próxima ronda del concurso, que buscará licitar las seis zonas que aún están libres y que se llevará adelante en cuanto finalice la actual. 

“Es necesario que se cree la menor carga de subsidio al Estado y por eso creamos también un fondo de transporte el cual se irá nutriendo con el pasar del tiempo. Incluso en el concurso se establece una alternativa de que en el caso de que el sistema no sea el adecuado podemos cambiar el sistema de gestión”, alega Abad.

Además del plano económico, otra denuncia por parte de las operadoras fueron las incongruencias de las condiciones y la falta de comunicación por parte de las autoridades a la hora de responder los interrogantes presentados. 

Al respecto, Abad afirma: “Siempre les hemos dado el espacio para que puedan opinar. Obviamente no se pueden recoger todos los criterios pero el proceso de la ordenanza ha sido muy participativo. No sería justo decir que no se han escuchado sus observaciones. Hemos dado toda la apertura para que los operadores se sientan tranquilos”.

Finalmente, cierra: “Vamos a mantener una conversación con ellos porque nuestra intención es darle las garantías que el concurso presenta. No es nuestra intención marginar a nadie. Creemos que nos podemos volver a reunir y conversar, explicar con mayor detenimiento lo que implica el concurso, despejar las dudas que se tengan e instarlos a que se sumen a la segunda ronda”.