Según los reportes que se han publicado este martes 23 de agosto, la energía eléctrica se ha disparado un 34,77% respecto al lunes, superando la barrera de los 365 euros por megavatio hora, dejando el precio como el más alto desde la implantación de la excepción ibérica.

De la misma manera ha sucedido con los costes del gas. 

El año pasado por estas fechas oscilaba entre los 30 y los 40 €/MWh, un año después, en 2022, el mercado mayorista marcaba ayer 210 €/MWh, es decir, multiplica por más de 5 su valor en un año.

Frente a este contexto marcado por la inestabilidad, Alfonso Sánchez Vicente, Director Gerente de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid, remarca las necesidades del sector para enfrentar todo esto.

“Se hace imprescindible que las Administraciones con competencias en la regulación de precios de la energía, adopten decisiones para compensar a las empresas que mayoritariamente operamos con autobuses de gas y eléctricos”, plantea en un posteo en su perfil de LinkedIn.

Y a su vez, agrega: “Si no se afronta este problema con determinación y cuanto antes, la solución a futuro cada vez será más complicada, teniendo en cuenta la volatilidad del mercado  actual, por una situación totalmente imprevisible para los operadores de transporte público”.

Actualmente, la EMT cuenta con casi 1.800 unidades propulsadas por gas, frente a un total de 2.100 autobuses. El resto a final de año será eléctrica, puesto que el gasóleo desaparece de los planes de la empresa a finales de este 2022.

Por lo tanto, el escenario ha marcado un latente desafío para mantener esta “flota 100% verde”, que ya cumple con todos los objetivos de descarbonización que se han propuesto para este año.

La apuesta por la electrificación

Cabe resaltar en este marco la decidida dirección que ha tomado la Empresa Municipal de Transporte hacia la electrificación de sus autobuses.

Es así que, recientemente, su director gerente anunció que se preparan para iniciar el proceso de compra de nuevas unidades de cero emisiones a lanzarse a fin de año.

Se trata de una licitación que incluiría entre 150 y 200 buses eléctricos. 

En el marco del anuncio no se dieron demasiados detalles, pero si se especifico que los mismos serán recibidos entre el 2024 y 2025.

Todo esto forma parte de un ambiciosos plan de inversión de más de €1.001,8 millones para la revolución tecnológica de la EMT, de los cuales €99,9 millones ya fueron invertidos en unidades de cero emisiones.

Los riesgos frente a las bonificaciones a trenes

El sector del transporte ha estado revolucionado recientemente, debido a que no solo se enfrentan a un incremento sostenido de los costes de la energía eléctrica y de los carburantes, sino que también a la gratuidad del los pasajes ferroviarios.

Los anuncios dados por parte del Gobierno central han desatado alerta, a causa de que esta medida puede generar un impacto negativo en los operadores y su apuesta por la electromovilidad.

Según ha informado recientemente Portal Movilidad España, fuentes del sector detallan que esto terminará afectando en la capacidad de inversión de las empresas en general.

Pero este no es el centro del problema, ya que esto forma parte de una acumulación de hechos que hacen cada vez más difícil la apuesta por la incorporación de autobuses eléctricos.

El escenario se había complejizado en un principio con la pandemia del coronavirus, donde habían perdido un porcentaje considerable de recaudación por la falta de viajeros.

Durante el 2021 se ha visto una acentuada recuperación, pero esta fue insuficiente para alcanzar las cifras de 2019. Particularmente, el servicio especial, incluyendo el ámbito urbano y el interurbano, experimentó una disminución del 34,2%, hasta los 209 millones de viajeros. 

A esto, se le suma el contexto internacional que hoy acontece a Europa, ya mencionado por el director gerente de la EMT de Madrid.