Tras vencer en balotaje presidencial a Andrés Arauz, con el 52,5% de los votos, Guillermo Lasso espera el próximo 24 de mayo para asumir su mandato como máximo mandatario ecuatoriano. 

El líder del movimiento Creando Oportunidades (CREO), de ideas económicas tendientes al liberalismo, tiene en su agenda de campaña compromisos con el sector energético y de sustentabilidad.

Pese a la preponderancia que le da al petróleo, el plan de gobierno del presidente electo asegura que se apostará por “una transición energética verde” y recuerda a la movilidad eléctrica. 

“Reduciremos los impuestos y aranceles a los vehículos eléctricos, híbridos y bicicletas para fomentar el uso de los mismos y contribuir aún más a la reducción de las emisiones de CO2”, afirma el documento respecto a la movilidad. 

En una entrevista a Frente Al Ambiente, Lasso indicó que le planteó «a los transportistas el cambio de motores diésel”. 

Y añadió: “Ahí hay una oportunidad de política para decir cero aranceles para vehículos eléctricos, pero también el Estado tiene que comprender que no puede tener el monopolio de las electrolineras”. 

En este sentido, se trata de la propuesta más concreta por parte del partido, mientras que proyecta electrificar industrias productivas y reducir la dependencia de combustibles fósiles para la obtención de energía. 

“Es importante abordar la contaminación ambiental como parte de nuestras agendas para un desarrollo sostenible”, señala el plan de Lasso, que aclara: “La necesidad de reducir las emisiones no excluye el uso de combustibles. Por ello, consideramos necesario mejorar la calidad de estos”. 

Cabe recordar que en Ecuador los vehículos eléctricos están exentos del arancel a la importación, así como también del impuesto a consumos especiales (ICE), hasta un precio de veta de 35000 dólares. Asimismo, están exentos un 12% del IVA.

El foco en los combustibles fósiles

El sector petrolero destaca en el documento, junto a un accionar privado, de donde se buscará aprovechar el combustible fósil “con responsabilidad ambiental, haciendo uso de los avances tecnológicos”. 

“Así, podemos contribuir a mejorar la calidad del aire que respiramos, ayudamos al medio ambiente y, en consecuencia, frenamos el avance del cambio climático”, indica.

El proyecto apunta a reestructurar las relaciones bilaterales con China, a explorar nuevos campos de producción petrolera y a incorporar una nueva política de importación de combustible. 

Asimismo, también contempla otro tipo de fuentes para acompañar el incremento del consumo. Es allí donde entran en juego la energía eólica y la solar, aunque no detalla accionares particulares.