Las islas en vistas generales denotan un claro ejemplo en sus modelos de sostenibilidad. 

Recientemente, se anunció que la zona insular busca acortar los plazos para su descarbonización y por sus características suelen servir como un territorio ideal para el despliegue de la electromovilidad.

Pese a esto y al comenzar a mirar esta región con lupa, puede notarse que particularmente el Cabildo de Tenerife va en contra de la corriente.

Héctor Rodríguez, secretario nacional en la Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos (AUVE), detalla en diálogo con Portal Movilidad España cuáles son las principales falencias que encuentran en la gestión local.

“Al Gobierno no le ha interesado, ni le interesan absoluto, la movilidad eléctrica en la isla, puesto que hemos visto que en los últimos siete años nos han hecho absolutamente nada por ella”, apunta en este sentido el representante de AUVE.

Uno de los principales motivos por los que plantea esta realidad es la falta de una red pública de puntos de recarga que está abierta al público las 24 horas del día.

Recientemente, fue noticia la apertura de 17 puntos de recarga gratuitos en el Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER) en sus instalaciones del Polígono Industrial de Granadilla de Abona, pero la realidad de esto era que los mismos permanecen abiertos solo de lunes a viernes en un reducido horario.

A lo que plantea: “Estos puntos están disponible de 7 AM a 4 PM, por lo cual solo pueden ser útiles para quienes trabajan en carreteras o pueden realizar una parada en medio del horario laboral”.

Esta gestión no resulta de una nueva inversión, ya que los mismos fueron instalados antes de la pandemia y habían sido cerrados a causa de la misma.

Por ello, hoy en día los abrieron nuevamente y agregaron dos nuevos enchufes de carga rápida. Pese a esto, cabe destacar que pertenecen a una inversión privada y no pública.

Otra de las críticas se dirige a esto mismo, la falta de inversión por parte de la administración local.

“En el 2018 se lanzaron una serie de subvenciones para desarrollar la infraestructura de recarga a nivel local, mientras que el resto de los cabildos instalaban sus propios puntos”, relata al respecto.

Un claro ejemplo de esto es cómo hoy La Laguna se encuentra en el trabajo de aprobar la medida para subvencionar en un 90% el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) a aquellas personas y entidades que decidan colocar puntos de recarga homologados para vehículos eléctricos.

A lo que agrega: “Veo desde aquel momento una clara falta de interés político en el tema directamente y  hoy esto se acentúa de la mano del actual consejero de Innovación, Enrique Arriaga”.

Según explica, ha mantenido una serie de reuniones a lo largo de estos años y se ha ido de cada una de ellas con más dudas que respuestas.

Según detalla, la administración trabaja sobre la electromovilidad con “una pasividad”, que no responde a las demandas que  con el paso del tiempo se han ido generando en esta materia.

Uno de los pocos nichos en los que ven que estos segmentos pueden expandirse es en el de los taxis, el cual a medida que pasa el tiempo comienza a registrar más unidades eléctricas.

Pese a eso, el sector se enfrenta a la principal barrera de no contar con los suficientes puntos de recarga rápidos en una de las islas capitalinas.

El transporte publicó no queda por fuera

En lo que respecta al transporte público, Rodríguez brinda la misma visión.

“No se ha visto una intención sostenida por electrificar las flotas, por el contrario, se continúan incorporando buses híbridos”, explica el representante de AUVE a nivel nacional.

En el mes de abril, el Consejo de Administración de la empresa de Transportes Interurbanos de Tenerife (Titsa) ha aprobado la compra de un total de 120 nuevos autobuses, de los cuales 115 unidades son Scania con propulsión híbrida.

Los vehículos adquiridos cuentan con un nuevo motor de combustión de 360 CV de potencia, al que se suma el motor eléctrico de 130 kW de potencia continua y una nueva batería de 7,9 kWh, con el doble de capacidad que su predecesora.

Frente a esta adjudicación recalca el hecho de que “Hay líneas como el San Andrés sería perfecta para una guagua eléctrica, ya que se tratan de pocos kilómetros, pero solo vemos en las noticias que llegan modelos a diesel, gas o híbridos”.