Las tecnologías cero emisiones se adueñaron del mercado en pocos años, eso seguro. Pero surge el interrogante sobre la convivencia de varias tecnologías, por caso, el hidrógeno y los vehículos 100% eléctricos.

Miguel Antonio Peña Jimenez, Secretario de la Asociación Española del Hidrógeno (AeH2), hace una primera aproximación: “A largo plazo veremos que la convivencia será total y cada sistema va a tener su aplicación en concreto”.

“Suele haber mucha discusión; el hidrógeno está pensado más bien para sistemas que tienen que recorrer una cantidad de kilómetros al día intermedia”, explica Peña.

Con esto, el Secretario de AeH2 hace referencia a grandes buques o camiones que recorren largas distancias. 

Existen dos razones por las que podrían ser aplicados en esos lugares: el hidrógeno puede llegar a tener autonomías de mil kilómetros y su almacenaje no ocupa ni pesa lo mismo que el de una batería.

Además, remarca que como el eléctrico quizás no tenga tanto espacio en esos segmentos, el hidrógeno no lo tendrá en los recorridos pequeños.

Otra cuestión a remarcar es el tiempo de repostaje. Con el hidrógeno puede hacerse en cinco minutos. Si se piensa en cargar una batería el tiempo podría llegar a la hora y media, si se habla de potencias altas.

Peña, igualmente, ve una aplicación del hidrógeno en los vehículos de menor porte. “Haciendo muchos kilómetros al día también tendría su utilidad”, comenta.

El profesional da como ejemplo su coche híbrido enchufable, el cual utiliza la mayoría del tiempo en eléctrico en ciudad pero cuando debe salir a la carretera y hacer distancias largas utiliza el motor diésel.

“Si yo pudiera hacer lo mismo con el hidrógeno, tendría un vehículo que ya no utiliza gasolina para viajes largos. Pero prácticamente el 98% de los días estoy en la ciudad”, sostiene.

Perte del Hidrógeno

El Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de Energías Renovables, Hidrógeno Renovable y Almacenamiento (ERHA) fue lanzado por el presidente Pedro Sánchez hace seis meses.

“Esta inversión que se hará por medio de los fondos Next Generation son muy importantes como cuando se lanzó la hoja de ruta del hidrógeno verde en el país”, señala Peña.

Por el momento en España la mayoría de los proyectos venía sucediendo a menor escala, pero, luego del impulso que se le dio desde el Gobierno central empresas como Iberdrola han decidido invertir grandes cantidades de dinero.

“Esto hace que el interés de todos los involucrados sea todavía mayor. Se calcula que hasta el año 2030 va a haber una inversión de unos 9.000 millones de euros”, explica el Secretario de AeH2.

Para el profesional estos fondos garantizan que se podrá desarrollar una tecnología de hidrógeno en España. “Creo que el Ministerio lo tiene claro, se debe desarrollar fomentando el tejido empresarial e industrial español”.

En España hace un tiempo no había empresas que se dedicarán específicamente a comercializar equipamiento y componentes . Por ejemplo, en la Asociación solo había cuatro de este tipo hasta hace poco. Esos números ahora se han multiplicada y la composición de AeH2 se modificó.

“Se hacían proyectos relacionados con hidrógeno, pero muy pocos. Hoy existe un tejido industrial español que es capaz de hacer componentes para diferentes partes de la cadena de valor”, complementa Peña.

Según el experto, con esta medida del Gobierno y si es “bien llevada a cabo”, el país tendrá la oportunidad de exportar hidrógeno.