Continúa la renovación del parque de vehículos patrulla de la Guardia Civil con la incorporación de nuevos automóviles que no solo reemplazan a los coches más antiguos, sino que también modernizan la flota con la incorporación de nuevas tecnologías de propulsión.

En esta ocasión, la Guardia Civil acaba de recibir 230 nuevos coches eléctricos que se suman a su flota de patrulleros repartida por todas las Comandancias del cuerpo policial.

El acto de entrega ha tenido lugar en la localidad madrileña de Alcalá de Henares, donde se hizo entrega de los 230 nuevos coches eléctricos ante la presencia de la directora general del cuerpo, María Gámez.

Esta última admisión es, según informa Nissan España en un comunicado de prensa, “una clara apuesta por la electrificación del parque móvil de la Guardia Civil”.

Los vehículos en cuestión son 230 nuevos Nissan Leaf totalmente eléctricos. Se trata de la versión con la batería de 40 kWh que alimenta un motor eléctrico de 110 kW (147 CV) de potencia con 320 Nm de par.

La energía se envía al tren delantero y le permite recorrer hasta 270 kilómetros de autonomía con una sola carga. Una vez agotada, puede pasar de un 20% a un 80% del nivel de batería en 60 minutos gracias a la opción carga rápida admitida, tal como comenta Periodismo del Motor.

En términos de prestaciones, el Nissan Leaf puede pasar de 0 a 100 km/h en 7,9 segundos y registra una velocidad máxima de 145 km/h. Todas las unidades lucen los acabados característicos de los coches patrulla de la Guardia Civil.

Combinan verde y blanco con escudos del cuero uniformado, así como un puente de iluminación de emergencia montado en el techo.

Aunque no se especifica en el comunicado de prensa, los nuevos coches eléctricos de la Guardia Civil parecen ser Nissan Leaf acabado Acenta de acceso a gama.

De ser así, en su equipamiento de serie encontramos control de presión de neumáticos, faros automáticos, sensor de lluvia, climatizador automático, llantas de aleación de 16 pulgadas y sistema multimedia con pantalla táctil de 8 pulgadas, Android Auto y Apple CarPlay.

Además, ofrece un amplio equipamiento de seguridad, como el control inteligente de trazada, control de ángulo muerto, asistente de frenada de emergencia con detección de peatones, alerta de marcha atrás con tráfico cruzado, asistente de cambio de carril, cámara de visión trasera y control de crucero inteligente. Cada unidad tiene un precio de venta al público en España de 25.200 euros.